El consumo de infusiones o tés es muy común en el mundo, aunque en cada región del planeta se realice con objetivos distinto, bajo costumbres diferentes y utilizando ingredientes que pueden variar un poco, todos en algún momento hemos probado una de estar ricas preparaciones.
Dentro de los muchos ingredientes que existen para preparar un té, debemos contar al limón como uno de los más usados, sobre todo cuando se trata de preparar una infusión con fines medicinales, pues este tiene una gran serie de propiedades que ejercen muchos beneficios sobre el cuerpo y ayudan a tratar de manera natural muchas complicaciones de salud.
¿Cuáles son sus principales propiedades y sus beneficios sobre el organismo?
Además de ser un té bastante fácil de preparar y muy económico, el valor nutricional es bastante beneficioso para la salud, sobre todo porque cuenta con una gran cantidad de vitamina C y de antioxidantes.
Dentro de los beneficios más resaltantes podemos destacar los siguientes.
Regula la digestión
El sistema digestivo es uno lo mayores beneficiados con el consumo de té de limón, pues esta bebida ayuda al buen funcionamiento de los riñones y del hígado, además de que sus ácidos contribuyen con la digestión de los alimentos.
Mantiene la piel en buen estado
Su gran aporte de vitamina C, la cual tiene un potente efecto antioxidante que ayuda a reducir los efectos dañinos que tienen los radicales libres sobre la piel, esto se traduce en un mejor aspecto y en el retraso santificativo de los signos del envejecimiento, además de ayudar a combatir las manchas cutáneas.
Ayuda a controlar el peso
El té de limón permite regular los niveles de pH en la sangre, lo que se traducen en una mejor probabilidad de perder peso, ya que los niveles altos de acidez en el organismo dificultan este objetivo.
Fortalece el sistema inmunitario
Es muy común que las personas beban infusiones de limón cuando padecen algún tipo de problema respiratorio, ya sea un resfriado, una gripe o una alergia, esto se debe a que la gran cantidad de antioxidantes que este tiene ayuda a darle más fuerza a las defensas del organismo, protegiéndolo de microrganismos que puedan infectar el cuerpo.
Mantiene la hidratación del cuerpo
Beber líquidos siempre ayudará mantener la hidratación del organismo, en el caso del té de limón es una buena opción para las personas que no les gusta beber agua, solo debemos asegurarnos de no usar mucha azúcar.
¿Cómo se prepara un té de limón?
Existen varias maneras, sobre todo porque se puede combinar con distintos ingredientes, en este caso mostraremos una forma sencilla y saludable de hacerlo.
Solo basta con agregar el zumo de dos limones en una taza de agua y llevar a fuego alto hasta que hierva.
Luego se agrega un trozo de cáscara de limón y se deja reposar por 10 minutos para luego retirarla, por último se agrega un poco de miel o de stevia para endulzar, para luego servir y disfrutar.
