Un innovador escocés que prometió «revolucionar la silla de ruedas» cuando era adolescente ha ganado un millón de dólares para hacer realidad su sueño.
Andrew Slorance, de 51 años, de Nairn, Escocia, se impuso a la competencia de los Estados Unidos, Japón e Italia para ganar el Desafío de Movilidad Ilimitada de Toyota con su silla de ruedas Phoenix i.
La silla de ruedas inteligente ajusta automáticamente su centro de gravedad para asegurar que el usuario pueda ser ágil y estable al mismo tiempo.
El concurso, de la Fundación Mobility Unlimited Challenge, se lanzó en 2017 con el fin de fomentar la innovación en tecnologías de asistencia para las personas con movilidad reducida en miembros inferiores.
El resto de finalistas incluyeron, además de la silla de ruedas Phoenix i, un simulador inteligente tipo prótesis, el cuál utiliza la inteligencia artificial para apoyar los músculos en el momento adecuado, mientras que la tecnología del exoesqueleto fue lo más presentado.
La silla de ruedas Phoenix i del Phoenix Instinct
Slorance se rompió la espalda cuando tenía 14 años después de caer de un árbol. Debido a la experiencia en silla de ruedas, le motivó a desarrollar una silla personalizada y que le permitiera el mayor confort posible.
«Recuerdo que estaba en la cama del hospital en Aberdeen y una terapeuta ocupacional entró y me subió la silla de ruedas a la cama», comenta Slorance a la agencia de noticias PA.
«Ella dijo: ‘Andrew, tengo tu nueva silla de ruedas para ti. Espero que estés de acuerdo en este modelo’.
«Miré esta cosa y pensé: ‘Tienes que estar bromeando, ¿verdad?’ El primer día que salí en esa silla de ruedas fue sin duda el peor día de mi vida.
«Me sentí completamente inmovilizado porque la silla era tan grande… De repente me di cuenta de que todo el mundo me miraba de una forma que la gente nunca antes había mirado.
«Poco después juré que, si nadie más lo hacía, un día revolucionaría la silla de ruedas para hacerla deseable, tecnología de punta, que realmente te diera una auténtica autonomía».
Con su compañía Phoenix Instinct, el escocés ha creado una silla de la que se espera que haga precisamente eso.
El chasis ultraligero de fibra de carbono del Phoenix i ayuda a la maniobrabilidad, mientras que la silla cuenta con un sistema de frenado eléctrico que detecta cuando el usuario va a bajar, gestionando el descenso automáticamente.
En enero de 2019 se concedieron cinco premios de medio millón de dólares a los finalistas para desarrollar sus prototipos de dispositivos, mientras que el premio de un millón de dólares que ha conseguido Phoenix Instinct se destinará a desarrollar la innovación de la empresa al mercado.
Corazonada
«Estuve a punto de no hacerlo», comenta Slorance sobre el concurso. «Sólo pensé: ‘No tengo ninguna oportunidad en esto, una pequeña empresa en el norte de Escocia’.
«Y pensé ‘no, esto es lo que haces Andrew, tienes que hacer esto. Este concurso está hecho para ti’.
«Tu silla de ruedas es la primera percepción que el mundo tiene de ti. Si este desarrollo se ve increíble y de alta tecnología, eso plantea una percepción positiva.
«Vivimos en una época en la que nuestro frigorífico puede ser inteligente, puede decirnos que la leche que ponemos ha caducado. Sin embargo, la silla de ruedas es lo que realmente necesitas cada día de tu vida… y todavía tiene la tecnología de 1984», comenta el inventor que revolucionará la silla de ruedas sin duda.