Las semillas de chía aparecen en nuestra relación de alimentos favoritos debido a que se sitúa como una de las mayores fuentes de omega-3.
Esta especie de planta, también conocida como la Salvia hispánica, es una de las grandes revoluciones del alimento gracias a sus propiedades.
Todo son beneficios en el consumo de las semillas de chía, que proviene de esa planta nativa del centro y sur de México, que va llegando también a Europa Occidental.
La chía: calcio, magnesio y boro
Y toca conocerlos porque estarán antes o después en nuestros supermercados. Las semillas de chía son una fuente indispensable vegetal de ácidos grasos poliinsaturados.
Son, a su vez, muy fáciles de integrar en la dieta habitual, sirviendo además para sustituir el huevo en la cocina vegana, por lo que es un alimento crucial.
Gracias al omega-3, sus valores sus ricos en ácidos grasos de este tipo, además de aportar ácidos omega-6 que son ideales para el organismo.
- Por otro lado, las semillas de chía aportan grandes sustancias que nos sentarán de maravilla, como son el calcio, el magnesio y el boro.
- Todas ellas ventajosas a la par que nutritivas, pero lo que mejor nos puede venir por parte de la Salvia hispánica es su gran capacidad de aportar fibra.
- Tanto de forma soluble como insoluble, la semilla de chía nos ayuda a regular el tracto intestinal, y favorece funciones tan elementales como es la digestión.
- Favorece así el trabajo de la flora intestinal, y todo lo que concierne a la actividad digestiva desde el momento en el que ingerimos el alimento hasta que lo expulsamos.
- Es un gran comodín para las funciones de la microbiota intestinal, que además vela por las mejores condiciones estomacales siempre y nos protege de infecciones.
- Por otro lado, aporta también muchos antioxidantes que ayudan a prevenir el enranciamiento de las propias grasas que podemos percibir.
Reduce el colesterol
En el apartado de beneficios de la chía sobre nuestro organismo, sobresale la capacidad protectora que mantiene sobre nuestra salud cardiovascular.
También en su forma de reducir el colesterol, que siempre nos preocupa en edades más adultas en función de los alimentos que tomamos.
El tránsito intestinal es otro de esos grandes beneficiados, donde la chía actúa en una mejora clave del estreñimiento ocasional.
También colaboran sus propiedades en la lucha contra la diabetes al ser un complemento ideal por la gran cantidad de fibra que contiene.
Ayuda a ralentizar la llegada del azúcar a la sangre de nuestros vasos sanguíneos, y la circulación de la sangre es básica para entender la reducción de enfermedades.
La pérdida de peso y su carácter antioxidante son otras dos razones por las que debemos tratar de sumar chía a nuestro plan alimenticio.