Para muchas personas la ambientación del hogar es indispensable para preservar la salud, hacer fluir las energías y generar espacios agradables y placenteros que nos hagan sentir bien mientras permanecemos en ellos, de ahí la importancia de agregar elementos naturales a la decoración de la casa, siendo las plantas ornamentales una de ellas.
Ahora bien, a la hora de escoger las plantas para nuestros hogares existen muchas opciones que hacen que sean una decisión difícil, sobre todo porque cada una de ella puede tener características y cuidados diferentes que debemos aprender antes de cultivarlas en casa.
Una de las plantas preferidas para decorar un hogar es la llamada planta cinta, científicamente llamada Chlorophytum comosum, la cual debemos aprender a conocer para poder tenerla en casa y poder darles los cuidados que requiere, previendo plagas o enfermedades que puedan afectarla y brindarle las condiciones físicas ideales para su correcto desarrollo.
La planta cinta es una planta herbácea y ornamental que se conoce por su intenso color verde, con hojas que tienen una forma muy característica, las cuales se parecen a una cinta de lazos, de ahí su nombre coloquial “planta cinta”, aunque su nombre científico es Chlorophytum, aunque en muchas regiones del mundo se le conoce como malamadre o lazo de amor.
¿Dónde y cuándo sembrar la planta cinta?
La reproducción de la planta se lleva a cabo por medio de la división de la planta o mediante la siembra de sus tallos florales, los cuales se siembran en la tierra para que broten sus raíces, siendo la primavera y el verano las mejores épocas del año para hacer que germine de manera más eficiente.
La mejor ubicación para esta planta es un lugar donde exista mucha luz solar, aunque se debe proteger de estos mis rayos para evitar daños en la superficie, sobre todo en el verano, que es cuando el calor se hace más intenso.
Del mismo modo se debe brinda protección del frío intenso, ya que estas no soportan temperaturas que se ubiquen por debajo de los 14°C, como las que se registran durante el invierno, mientras que en la primavera y el verano pueden resistir hasta los 26°C sin que los rayos solares le den directamente.
De no garantizar estas condiciones la planta puede perder su belleza y pueda verse afectada la densidad de las hojas, lo que le daría lugar a que crezcan muy finas y que pierdan el variegado que la caracterizan.
¿Cómo se prepara la tierra?
Lo primero que debemos saber es que cualquiera de los sustratos utilizados para la jardinería sirven para nutrir la tierra y brindarle a la palta un desarrollo radicular eficiente y saludable, aunque sí se recomienda evitar el uso de sustratos económicos, ya que por lo general estos tienen grandes cantidades de sal que interfieren con el drenaje.
Es indispensable que el sustrato que se use garantice un buen drenaje, evitando el encharcamiento que puede pudrir la planta en cuestión de días, aunque esto no es una tarea difícil, ya que actualmente hay muchos sustratos aptos para el cultivo de la planta cinta.
De no prepararse la tierra adecuadamente, la planta tendrá inconvenientes para crecer, multiplicarse y florecer, perdiendo el atractivo que caracteriza a esta planta.
¿Cómo se debe regar?
Cuando se esté en primavera o en verano, lo recomendable es que la planta sea regada dos veces por semana, mientras que en el invierno el periodo de riego debe ser de 10 días, mientras que durante el resto del año se debe aumentar el tiempo entre un riego y el otro, siempre manteniendo la tierra húmeda pero no encharcada.
A pesar de que es una planta que necesita mucha agua, también le cae muy bien que sus hojas se nebulicen de forma periódica con agua que esté a temperatura ambiente.
Los jardineros expertos y los agricultores sugieren que el riego no se lleve a cabo hasta que no se observe que el sustrato se ha secado, además de que recomiendan colocarla en un lugar donde obtenga luz, para que esta ayude a secar el agua que sobra.
Plagas y enfermedades comunes de la planta cinta
A pesar de ser una planta altamente resistente frente a las plagas, esta puede ser infestada por pulgones o cochinillas, las cuales suelen aparecer en la base de las hojas y que se pueden tratar con pesticidas.
Mientras que la mayoría de las enfermedades que presenta la plata cinta son ocasionadas por distintos factores, como por ejemplo un desequilibrio en la cantidad de agua, luz y otros nutrientes.
Cuando hay un exceso de agua la planta lo demuestra con la flacidez de sus hojas, haciendo que se caigan más fácilmente, se pierde la tensión o adopta un aspecto crujiente, así como la falta de agua o de sales puede producir que las puntas de las hojas se sequen y tomen un color marrón.
Por otro lado, un déficit en la cantidad de hierro también puede producir problemas, haciendo que sus hojas jóvenes tomen un tono amarillo y que sus nervios estén más pronunciados, lo que se puede corregir aplicando una base de quelato de hierro.
También puede presentarse el caso en el que la palta cinta esté ubicada en un lugar con mucha luz y aun así experimentar un crecimiento lento con hojas pequeñas, en esta situación hay que corregir el déficit de nitrógeno, utilizando un fertilizante que tenga este elemento en una cantidad grande.