La leche es uno de los alimentos más consumidos alrededor del mundo, ya sea que se tome sola, se combine con frutas o se integre en una gran cantidad de recetas dulces y saladas, este alimento casi siempre está presente en la mayoría de las despensas de las cocinas alrededor del planeta.
De hecho, los expertos en salud siempre recomiendan consumir leche debido a las propiedades que esta tiene para ofrecerle a la salud, sin embargo, como puede suceder con cualquier otro alimento, existen algunos aspectos que hay que considerar a la hora de integrar a la dieta, sobre todo con lo relacionado a la cantidad y el tipo de leche.
Muchas personas suelen tomar leche todos los días, pues esto puede que no sea peligroso, sin embargo, el consumo diario debe ser igualmente moderado, ya que un exceso también podría producir algunas consecuencias negativas para la salud, además de que se debe considerar si existe alguna contraindicación médica.
Efectos de beber mucha leche
De acuerdo a una investigación publicada en British Medical Journal, tomar más de tres vasos de leche todos los días aumenta el riesgo de que se produzca una muerte prematura y eleva las probabilidades que se produzcan fracturas de huesos, sobre todo en mujeres.
Aunque la leche siempre se ha relacionado con beneficios para el sistema óseo, resulta que esta también contiene un tipo de azúcar conocido como Galactosa, la cual ha demostrado que acelera el envejecimiento y reduce la esperanza de vida.
Sin embargo, los investigadores también señalan que son necesarios muchos más estudios para poder ampliar los resultados y poder tener más detalles de lo que el consumo desmedido de leche puede reproducir en el cuerpo, sobre todo tomando en cuenta factores como la etnia y el nivel de tolerancia a la lactosa.
El estudio también sirvió para relacionar al consumo de otros lácteos con un riesgo menor de muerte y de fracturas, sobre todo en productos con bajo contenido de grasa, ya que esta interfiere en los beneficios que el calcio produce, por eso se recomienda alimentos como el yogur o los quesos bajos en grasas.
¿Cuánta leche tomar al día?
De acuerdo a la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética (Fesnad), la recomendación diaria debe ser de 2 a máximo 3 raciones de leche y de productos lácteos al día.
De igual modo, la Fesnad aclara que los alimentos lácteos juegan un papel importante en cada etapa de la vida de las personas, destacando la fundamental que es la alimentación durante la infancia y la adolescencia, etapa en la cual se debe consumir de 3 a 4 raciones de lácteos por día, pues durante estas edades es indispensables su aporte de proteínas, ya que estas contribuyen con el desarrollo.
Cuando se habla de raciones de lácteos, es lo que equivale a 200 mililitros de leche, 2 yogures, 125 gramos de queso fresco, 20 gramos de queso curado o 30 gramos de queso semicurado.
Ahora bien, para personas adultas, la Federación sugiere entre 2 a 4 raciones de lácteos diarias, mientras que señala la importancia que estos tienen en la dieta de mujeres en estado de gestación o durante la lactancia.
Beneficios de tomar leche
Según la web Mejor con Salud, la leche es una de las mayores fuentes de calcio, el cual es un mineral indispensable para mantener huesos y dientes saludables, por eso se recomienda consumirlo de manera adecuada.
Además, existen otros muchos otros beneficios, como por ejemplo, la prevención de la obesidad, el mantener una piel saludable, la reducción del estrés, un menor riesgo de sufrir del corazón, prevenir el cáncer, tratar la depresión, aumentar la masa muscular y el aporte de energía.
Así que solo es cuestión de consultar con los profesionales y pedir ayuda para planificar una dieta balanceada.
Contraindicaciones
Por otro lado, también se mencionan algunas contradicciones de la leche, siendo la principal la intolerancia a la lactosa, un problema que se presenta en casi la mitad de la población, incluso muchos no se han percatado de dicho problema.
También se señala que existen personas que tienen problemas para absorber el calcio, experimentan alergias o presentan cuadros asmáticos.
Por eso siempre se recomienda consultar con los expertos en salud antes de incluir cualquier alimento a la dieta.