Muchos ciudadanos en España tienen la posibilidad de aumentar la cuantía a cobrar en su pensión contributiva de jubilación a través de diferentes acciones. Diversas acciones que se pueden llevar a cabo antes de acceder a la jubilación.
Para tener derecho a una pensión contributiva de jubilación en España, es necesario haber cotizado un mínimo de 15 años a la Seguridad Social. Dos de esos años deben haberse cotizado en los 15 años inmediatamente anteriores a la jubilación.
Existen dos factores fundamentales que influyen en la cuantía final a cobrar en la pensión contributiva de jubilación: el número de años cotizados y las bases de cotización del trabajador durante su vida laboral.
Aumentar la pensión antes de la jubilación
Una opción para aumentar la cuantía de la pensión contributiva consiste en incrementar las bases de cotización durante los años previos a la jubilación.
Actualmente, para calcular la cuantía de la pensión de jubilación se toman como referencia los últimos 25 años de cotización. Sin embargo, el método de cálculo de la pensión se modificará progresivamente durante los próximos años.
Las personas en paro y cercanas a la edad de jubilación también tienen la oportunidad de incrementar la cuantía a cobrar en su pensión contributiva.
Una de estas fórmulas pasa por cobrar el subsidio para mayores de 52 años, una ayuda por desempleo que se puede percibir desde los 52 años de edad hasta el cumplimiento de la edad ordinaria de jubilación.
Durante la percepción del subsidio, el ciudadano cotiza a la Seguridad Social de cara a la futura pensión de jubilación.
Desde el SEPE señalan que «la entidad gestora (Servicio Público de Empleo Estatal o Instituto Social de la Marina) ingresará las cotizaciones a la Seguridad Social correspondientes a la jubilación. La base de cotización por jubilación será el 125 % del tope mínimo de cotización vigente en cada momento».
Convenio Especial y jubilación demorada
Los ciudadanos en situación de desempleo y cercanos a la edad de jubilación, tienen la posibilidad de suscribir un Convenio Especial con la Seguridad Social.
A través de este Convenio Especial pueden aportar una cuota de cotización durante un número determinado de años antes de la jubilación. De esta forma, también se puede aumentar la cuantía a percibir en la pensión contributiva de jubilación.
En cualquier caso, para suscribir un Convenio Especial con la Seguridad Social, el ciudadano debe de cumplir una serie de requisitos imprescindibles.
Finalmente, también es conveniente hablar de la modalidad de jubilación demorada. Se trata de la posibilidad de seguir trabajando y cotizando más allá de la edad ordinaria de jubilación.
En la actualidad, la Seguridad Social ofrece varios incentivos económicos a los trabajadores que se acojan a la jubilación demorada y sigan cotizando por encima de la edad ordinaria de jubilación. Esto permite a dichos trabajadores obtener una pensión contributiva mayor en el momento de la jubilación definitiva.
Así, los trabajadores que se acogen a la jubilación demorada pueden elegir entre tres incentivos que habilita la Seguridad Social. Uno de ellos consiste en un porcentaje adicional hasta el 4% por cada año adicional cotizado.
Una segunda opción se basa en una cantidad a tanto alzado entre 5.000 y 12.000 euros por cada año extra cotizado por encima de la edad de jubilación ordinaria. El importe dependerá de los años cotizados previamente por el trabajador antes de la jubilación demorada.
Además, el trabajador también puede elegir por una combinación de estos dos incentivos planteados. Sea como fuere, cualquier incentivo contribuye a aumentar el importe de la pensión contributiva de jubilación que corresponda al ciudadano.