Que la limpieza del hogar sea efectiva, es en ocasiones una tarea tediosa. Pues por mucho que nos empeñemos, mantener todo limpio puede suponernos un nivel de estrés que sin duda indique, que algo estamos haciendo mal. Y es que, aunque se de por hecho que es una tarea fácil, a la hora de la verdad, no saber cómo hacerlo de la mejor manera, puede suponernos perder un tiempo extra que en ocasiones no tenemos.
Pues, el tiempo es oro. Esta es una de las principales premisas de hoy en día. El trabajo, los estudios, la familia… Vivimos casi sin tiempo para pararnos a pensar, y en todo ello, debemos incluir la limpieza de nuestra casa. Entonces, ¿Cuál es el truco para tener siempre la casa limpia sin que esto suponga caer en un estado de estrés que no sepamos ni por donde empezar?
En primer lugar, hay una premisa fundamental: La organización. Para ello, es fundamental dividir las tareas en diarias, semanales, mensuales, y contar con las limpiezas generales. Puede sonar más agobiante aún, pero si tenemos esto claro, iremos directos a realizar la tarea sin dilación alguna. Tras realizar la división, ahora toca encontrar el momento. Por ejemplo, por la mañana temprano, las diarias; los sábados a primera hora, las semanales; las mensuales siempre el primer finde del mes y una limpieza general antes de cada cambio de estación.
El segundo de los trucos fundamentales para llevar una limpieza óptima y no perder demasiado tiempo, es conocer la manera más efectiva para según que tarea doméstica. En este sentido, conocer los productos específicos para cada zona, es fundamental. Pero también, es una ventaja conocer trucos caseros para ser más eficientes con el menor esfuerzo posible.
La limpieza del suelo: La que más quebradero de cabeza puede dar
Organización y eficiencia son la base de una buena limpieza para el hogar. Esto significa, que además de una buena planificación, hay que conocer la fórmula perfecta para limpiar cada zona o superficie. En este sentido, podrían ser discutibles muchos aspectos en cuanto a productos, frecuencia e incluso cuáles son las zonas que más y menos se ensucian, pero hay una en la que casi todo el mundo estará de acuerdo. Y es que la limpieza del suelo, debe ser diaria por la cantidad de polvo, pelusas, pelos, etc. que se acumulan.
El suelo es una de las zonas de la casa, que por mucho que cuides, siempre cuenta con algo de suciedad. Y es que las pisadas con los zapatos de la calle, el polvo cuando se abren las ventanas, o los pelos propios o de nuestras mascotas, hace que a diario, haya que recoger para que se vea limpio. Sin embargo, a veces se torna difícil precisamente por lo escurridizo de la suciedad de esta zona de la casa. Pues por mucho que pasemos la escoba, la suciedad se volará y más que limpiar, se trasladará a otro lado.
El truco definitivo contra las pelusas
Coger la escoba y barrer, es el primer impulso cuando vemos pelusas por el suelo. Sin embargo, a pesar de que esta técnica es efectiva para motas más pesadas como las migas o la arena, en cuanto a tema pelos y pelusas, no es nada eficaz. Pues en el mejor de los casos, se quedarán enredadas en el cepillo y lo único que harás es trasladarlas de un sitio a otro.
A buen seguro, la única solución efectiva que encuentras para la limpieza del suelo, es comprar una aspiradora o un dispositivo independiente de limpieza. Ambas opciones, a costa del desembolso de una buena cantidad de dinero. Sin embargo, es mucho más fácil. Si quiere eliminar las pelusas del suelo, tan solo necesitas una media vieja. Enróllala en el cepillo de barrer y pásala a modo mopa. Verás como es infalible.