Según los expertos de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), cada hogar español gasta unos 640 euros al año en calefacción de media. Este aumento del gasto en calefacción suele producirse durante los días fríos del año, en otoño e invierno.
Así, desde la OCU han realizado un análisis sobre los diferentes elementos de calefacción del mercado, para determinar cuáles son los más eficaces y más baratos para los consumidores.
Para ello, han calculado y comparado el coste anual de calentar una vivienda de unos 90 m2 en una región fría de España. Tras este análisis, los expertos de la OCU destacan la calefacción con biomasa y la aerotermia como las mejores opciones.
MEJOR CALEFACCIÓN, SEGÚN LA OCU
Hay que tener en cuenta que cada método de calefacción cuenta con ciertas limitaciones. Es decir, no todas las viviendas cuentan con acceso a la red de gas o un espacio de almacenamiento suficiente para los pellets.
En primer lugar, vamos a hablar de la calefacción con biomasa. Para los expertos de la OCU, este método de calefacción es uno de los más sostenibles y baratos para los ciudadanos en España.
Desde la OCU señalan que «las estufas y calderas de biomasa aprovechan los residuos orgánicos de las podas o los huesos de aceitunas, por lo que son una opción sostenible. Las estufas distribuyen aire caliente, mientras que las calderas calientan un circuito de agua que distribuye el calor con radiadores o suelo radiante».
Este método de calefacción es especialmente recomendable para las viviendas con espacios grandes, que permiten almacenar los sacos de pellets o huesos. Otra de las ventajas es que es un sistema sostenible, ya que sus emisiones de CO2 son prácticamente nulas.
Según los datos recabados por la OCU, consiste en una forma económica de calentar el hogar, por sólo 559 euros al año. Sin embargo, presenta ciertos inconvenientes, ya que es un método de calefacción que requiere de un conducto de evacuación de humos al exterior. Además, también necesita un mantenimiento frecuente.
BOMBAS DE CALOR
Otra opción interesante que destacan desde la OCU son las bombas de calor, que calientan y enfrían el hogar. Un aire acondicionado es una bomba de calor, ya que la energía térmica del exterior se utiliza para calentar o refrigerar el aire de la casa. Así se puede utilizar como apoyo para otros sistemas de calefacción. Los aires acondicionados son métodos de calefacción aire-aire.
Por su parte, también encontramos las bombas de calor aire-agua, como la aerotermia. Desde la OCU argumentan que «son bombas de calor que calientan el agua de un circuito, similar a lo que hace una caldera. Estos sistemas aire-agua son adecuados para obra nueva o si se quiere realizar una reforma completa».
Una de las ventajas de las bombas de calor es que son muy eficientes. Además, aunque el precio de la electricidad es elevado, su gasto en energía es bastante económico para los hogares. Según los expertos de la OCU, supone un gasto entre 240 y 300 euros al año.
Igualmente, también presenta ciertos inconvenientes, debido a que requieren unidades exteriores. Además, los sistemas de aerotermia suelen requerir de una importante inversión inicial, cercana a los 8.000 euros.