Los ciudadanos en España pueden obtener importantes beneficios económicos por retrasar su edad de jubilación en España. Así, las ganancias adicionales recibidas se sumarán a la pensión contributiva de jubilación de cada ciudadano.
Para tener derecho a una pensión contributiva de jubilación en España es necesario haber cotizado un mínimo de 15 años a la Seguridad Social. No obstante, con sólo 15 años cotizados, el trabajador tendrá derecho únicamente a una cuantía de pensión equivalente al 50% de la base reguladora.
Por ejemplo, para los trabajadores que se jubilen en 2024, la Seguridad Social exige una cotización de, al menos, 36 años y seis meses para tener derecho al 100% de la base reguladora en la pensión contributiva de jubilación.
Beneficios de retrasar la edad de jubilación
El Gobierno de España quiere que los ciudadanos retrasen cada vez más su edad de jubilación. Sin embargo, no se atreven a imponer una nueva subida en la edad de jubilación, más allá de los aumentos previstos hasta el año 2027.
Por eso, desde el Ejecutivo Central han aprobado incentivos económicos para aquellos ciudadanos que se acojan a la modalidad de jubilación demorada. Es importante aclarar que la jubilación demorada es totalmente voluntaria para los trabajadores en España.
La jubilación demorada consiste, principalmente, en que el ciudadano siga trabajando por encima de la edad de jubilación ordinaria que le corresponde. A cambio, la Seguridad Social ofrece al trabajador una cantidad económica por cada año adicional cotizado.
En 2024, la edad de jubilación ordinaria es de 66 años y seis meses para los ciudadanos con una cotización inferior a 38 años a la Seguridad Social. Por su parte, también es de 65 años para las personas con una cotización igual o superior a 38 años.
Para acceder a la jubilación demorada es necesario haber cotizado un mínimo de 15 años a la Seguridad Social. Además, también es obligatorio que el trabajador haya alcanzado la edad de jubilación ordinaria que le corresponde.
Incentivos que ofrece la Seguridad Social
Los trabajadores que accedan a la jubilación demorada obtendrán un incentivo económico de cara a su pensión contributiva. Este es el principal beneficio para los ciudadanos en España de retrasar voluntariamente su edad de jubilación.
Igualmente, también puede resultar beneficioso para aquellas personas que aman su trabajo y no desean jubilarse, por lo que se ven con ganas y más fuerzas para continuar ejerciendo su profesión.
Con todo ello, los trabajadores que se acojan a la jubilación demorada podrán elegir entre tres incentivos que ofrece la Seguridad Social:
- Un porcentaje adicional de hasta el 4% por cada año completo cotizado más allá de la edad ordinaria de jubilación. De este modo, constituye un incremento importante sobre la cuantía de la pensión contributiva.
- Una cantidad a tanto alzado por cada año adicional cotizado, entre 5.000 y 12.000 euros. El importe a recibir por cada año extra cotizado depende de los años cotizados por el trabajador previos a la jubilación demorada.
- La tercera opción consiste en una combinación de los dos incentivos anteriores.
Respecto a la modalidad mixta, desde la Seguridad Social indican que «se calcula en función de los años que se alargue la vida laboral. Si se acredita un periodo de dos a diez años completos cotizados entre la fecha ordinaria y la fecha efectiva de jubilación, el complemento consistirá en la suma de un porcentaje adicional del 4 por ciento por cada año de la mitad de ese período, tomando el número entero inferior y una cantidad a tanto alzado por el resto del periodo considerado».