No todas las personas que llegan a los 65 años de edad pueden cobrar una pensión contributiva de jubilación. Para tener derecho a una pensión contributiva de jubilación, es necesario haber cotizado un mínimo de años a la Seguridad Social.
En concreto, para tener derecho a una pensión contributiva de jubilación es obligatorio haber cotizado, al menos, 15 años a la Seguridad Social. Además, dos de esos años de cotización deben haberse completado en los 15 años anteriores a la jubilación.
Pensión de jubilación con 5 años cotizados
Una persona que solamente haya cotizado 5 años a la Seguridad Social, no podrá percibir una pensión contributiva de jubilación. No obstante, existe un tipo de jubilación específica para las personas que han cotizado menos de 15 años durante su vida laboral.
Se trata de la pensión no contributiva de jubilación del IMSERSO (Instituto de Mayores y Servicios Sociales). Las personas que han cotizado solamente 5 años a la Seguridad Social pueden acceder a este tipo de pensión de jubilación.
Desde el IMSERSO explican que «la pensión no contributiva de jubilación asegura a todos los ciudadanos mayores de 65 años y en estado de necesidad una prestación económica, asistencia médico-farmacéutica gratuita y servicios sociales complementarios, aunque no se haya cotizado o se haya hecho de forma insuficiente para tener derecho a una pensión contributiva».
En concreto, la pensión no contributiva de jubilación está destinada a las personas que no han conseguido cotizar un mínimo de 15 años a la Seguridad Social durante su vida laboral. Así, se puede cobrar esta pensión de jubilación especial, incluso, sin haber cotizado nunca a la Seguridad Social.
Importe de la pensión no contributiva de jubilación
Al no exigirse el cumplimiento de ningún requisito de cotización, el importe de la pensión no contributiva de jubilación es considerablemente inferior a las pensiones contributivas de jubilación.
El importe de la pensión no contributiva de jubilación se actualiza cada año por parte del Gobierno de España. En 2024, se ha producido una revalorización del 6.9% en la cuantía de la pensión no contributiva de jubilación.
Actualmente, la cuantía de la pensión no contributiva de jubilación para un beneficiario individual es de 7.250,6 euros al año. Teniendo en cuenta que este tipo de pensión se devenga en 14 pagas al año, supone una cuantía mensual de 517,90 euros.
Desde el IMSERSO señalan que «la cuantía individual actualizada para cada pensionista se establece a partir del citado importe y en función del número de beneficiarios que vivan en el mismo domicilio, de sus rentas personales y/o de las de su unidad económica de convivencia, no pudiendo ser la cuantía inferior a la mínima del 25% de la establecida».
Además, el IMSERSO también ofrece un complemento económico que pueden cobrar las personas perceptoras de una pensión no contributiva de jubilación. Consiste en el ‘complemento para titulares de pensión no contributiva que residan en una vivienda alquilada’. Un complemento que tiene un importe de 525 euros en 2024.
Para tener derecho a cobrar la pensión no contributiva de jubilación es necesario haber cumplido 65 años y carecer de ingresos suficientes. Para el IMSERSO, existe carencia de rentas cuando los ingresos en cómputo anual son inferiores a 7.250,6 euros. Igualmente, es obligatorio residir en España y haberlo hecho por un periodo de diez años, siendo dos de ellos consecutivos e inmediatamente anteriores a la fecha de solicitud de la pensión.