Los miembros del Consejo Municipal de Integración de Cuenca han conocido el estudio de viabilidad de las escaleras mecánicas al Casco Antiguo, resolviendo en este encuentro sus dudas de la mano del alcalde, Darío Dolz, y del redactor del documento, Pablo Garrido.
De este modo, durante la presentación se ha destacado que se trata de un sistema totalmente accesible, contemplando sistemas para personas con discapacidad visual o auditiva. Asimismo, está previsto que pueden utilizarlo quienes tengan dificultades de movilidad o vayan en silla de ruedas, pues se incluye la opción de unir varios peldaños para que haya espacio suficiente en estos casos.
El primer edil de Cuenca ha recordado que el proyecto de accesibilidad al Casco va unido a otras medidas de movilidad en la ciudad en las que ya está trabajando el Consistorio, pues «buscamos una solución global con el objetivo de dar todas las facilidades tanto a los conquenses o visitantes que suban a nuestra zona histórica como a los vecinos del barrio que quieran bajar al centro».
¿En qué consiste la accesibilidad?
La accesibilidad es la cualidad de fácil acceso para que cualquier persona, incluso aquellas que tengan limitaciones en la movilidad, en la comunicación o el entendimiento, pueda llegar a un lugar, objeto o servicio. Descubra la normativa sobre la ley de accesibilidad estatal y por comunidad autónoma.
La accesibilidad la podemos relacionar con los siguientes términos:
- Arquitectónica: referida a edificios públicos y privados.
- Urbanística: referida al medio urbano o físico.
- Transporte: referida a los medios de transporte públicos.
- Comunicación: referida a la información individual y colectiva.
- Digital: es la facilidad de acceso a las TIC y a contenidos en Internet, para cualquier persona sea con discapacidad, de edad avanzada o por privación circunstancial.
La accesibilidad universal es aquella condición que deben cumplir los entornos, procesos, bienes, productos y servicios, así como los objetos o instrumentos, herramientas y dispositivos, para ser comprensibles, utilizables y practicables por todas las personas en condiciones de seguridad, comodidad y de la forma más autónoma y natural posible.
Actualmente, la accesibilidad ha dejado de ser sinónimo de supresión de barreras físicas para adoptar una dimensión preventiva y amplia, generalizable a todo tipo de espacios, productos y servicios.
Por otra parte, se trata de una variable fundamental para garantizar el cumplimiento del principio de igualdad de oportunidades, convirtiéndose paulatinamente en un reconocimiento general, como mejora de la calidad de vida de todos los ciudadanos.
Desde el punto de vista poblacional, podemos decir que la accesibilidad es fundamental para un 10 % de la población, para un 40 % es necesario y para el 100 % es confortable.
La accesibilidad es un derecho de la persona y, como tal, debe ser tratado para conseguir la equiparación de de oportunidades. Así mismo, la persona tiene derecho a la autonomía y la movilidad personal, como correspondencia al logro de una vida plenamente independiente.