El huevo es un ingrediente muy utilizado en la cocina a lo ancho y a largo de todo el mundo, por lo que no nos debería llegar a extrañar que la gente se preocupe acerca de si puede añadirlo a su dieta diaria o es una mala idea comerlo todos los días. Este producto de origen animal suele ser muy barato y de fácil acceso, además de nutritivo y sabroso. En esto radica su popular.
Por lo tanto, las bondades del huevo son varias, como hemos comentado previamente, pero hay que tener en cuenta una cosa, y es que todo, en exceso, termina siendo perjudicial. Esta norma la debemos considerar de forma independiente de si es un producto de origen animal o vegetal. El huevo, por lo tanto, no es una excepción a esta regla.
No hay que dejarse llevar, de todas formas, por cualquier opinión extremista acerca de las posibles consecuencias de comer huevo a diario y sí que tenemos que incluirlo en nuestra dieta semana con moderación y teniendo en cuenta el tipo de preparación que hacemos para consumirlo.
Peligros de comer huevos a diario
La ingesta diaria de huevos no es para nada recomendable y los expertos, según algunos estudios realizados, aseguran que la mortalidad causada a raíz del colesterol y derivada en problemas cardiovasculares se ve aumentada en un gran número tras comer de forma diaria medio huevo al día.
Pero la cosa no queda ahí, sino que tenemos que añadir que puede aumentar la aparición de cáncer en un 7% también, así que es indispensable pararse a pensar en comer este ingrediente de forma esparcida durante la semana. No es recomendable comer huevos todos los días a pesar de tener unas características nutricionales muy buenas y dar una sensación de saciedad muy grande.
Así que podemos llegar a la conclusión de que sí que resulta de un potencial peligro comer huevos a diario y que, de esta forma, añadirlos a la dieta de una forma espaciada es la mejor idea que podemos tener al respecto. De todas formas, para consumir huevos de las formas más sanas posibles, vamos a ver qué preparaciones nos ofrecen las mejores condiciones de salud.
Las formas más sanas de preparar huevos
Bien es cierto que el huevo tiene una versatilidad enorme dentro del ámbito culinario, aunque no todas las preparaciones son especialmente sanas. Teniendo en cuenta esto, si vamos a cocinar un huevo la peor forma y la menos saludable es hacerlo frito. Esta elaboración añade hasta un 50% más de grasa, que es totalmente prescindible. Lo más parecido, si quieres añadirlo a tu dieta habitual, es hacerlo a la plancha con muy poco aceite.
Por otro lado, la forma más saludable que sí que podemos añadir más a menudo en nuestro dieta es cocerlo en agua caliente, lo que comúnmente se llama huevo duro o huevo cocido. Gracias a esta elaboración no es necesario añadir ningún tipo de grasa, por lo que las calorías y los nutrientes quedan perfectamente cuidados y el sabor no se altera para nada.