La pensión de incapacidad permanente tiene la finalidad clara de paliar la pérdida de ingresos que sufre un trabajador debido a una lesión o enfermedad, que reduce o anula su capacidad laboral.
Así, la solicitud de incapacidad permanente se debe realizar inicialmente a través de la vía administrativa, en el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). En caso de que te denieguen la solicitud, se puede establecer una Reclamación Previa frente al INSS. Además, también se puede llevar el caso a la vía judicial como última opción.
Importe de la incapacidad permanente
La cuantía a percibir por la pensión de incapacidad permanente depende de varios factores. Así, el Gobierno de España actualiza cada año las cuantías de las pensiones contributivas de incapacidad permanente.

En 2024, las cuantías de las pensiones de incapacidad permanente se han revalorizado en un 3,8% con respecto al año anterior, debido al IPC interanual registrado en 2023. Además, las pensiones mínimas de incapacidad permanente se han actualizado con un aumento del 6,9%.
Con todo ello, la cuantía a percibir por cada pensionista de incapacidad permanente depende de su base reguladora como trabajador, y del grado de incapacidad reconocido por parte del Instituto Nacional de la Seguridad Social.
El grado de invalidez reconocido es uno de los aspectos más importantes para determinar el importe de la pensión a percibir. Por ello, muchos trabajadores luchan por el reconocimiento de un grado de incapacidad mayor.
Actualmente, en España se pueden reconocer cuatro grados diferentes de incapacidad permanente: Parcial, Total, Absoluta y Gran Invalidez. Igualmente, las pensiones de invalidez pueden derivar de accidente de trabajo, accidente no laboral, enfermedad profesional o enfermedad común.
El hecho causante es un elemento clave en diferentes aspectos de la incapacidad permanente. Sin embargo, no tienen ninguna influencia sobre el importe total a recibir por la pensión de incapacidad permanente.
Cuantía por cada grado de incapacidad permanente
Tal y como hemos comentado anteriormente, el grado de invalidez es el elemento más característico para determinar el importe de pensión a cobrar por una incapacidad permanente. Si bien, las bases de cotización del trabajador también son claves, ya que servirán para calcular la base reguladora.
Con todo ello, estos son los porcentajes de base reguladora que corresponden cobrar por cada grado de incapacidad permanente en España:
- Incapacidad permanente parcial: En este caso, consiste en una indemnización a tanto alzado de pago único. El importe es equivalente a 24 mensualidades de la base reguladora que sirvió para el cálculo de la incapacidad temporal».
- Incapacidad permanente total: Implica la percepción de una pensión del 55% de la base reguladora. Si la persona beneficiaria tiene 55 años o más y se encuentra en paro, el porcentaje puede aumentar en un 20%. De este modo, con la incapacidad permanente total cualificada se puede cobrar una pensión del 75% de la base reguladora.
- Incapacidad permanente absoluta: Conlleva la percepción de una pensión equivalente al 100% de la base reguladora.
- Gran Invalidez: También implica cobrar una pensión equivalente al 100% de la base reguladora, además de un complemento no inferior al 45% de dicha base reguladora.
El complemento a cobrar en la Gran Invalidez se cobra debido a que se considera que el trabajador necesita la ayuda de terceras personas para desarrollar las actividades básicas del día a día.
Hasta el momento, la incapacidad permanente absoluta y la Gran Invalidez también se podían compatibilizar con la actividad laboral. Sin embargo, una nueva sentencia del Tribunal Supremo cuestiona este hecho.