A pesar de que ya estamos a 4 de enero y seguro que te has planteado algún propósito nuevo para este año 2019 que acaba de comenzar, la mayoría de esas nuevas intenciones no comienzan a aplicarse hasta pasado el Día de Reyes en nuestro país, cuando volvemos a retomar la vida habitual.
La estadística dice que la llegada del Año Nuevo nos envalentona y nos hace plantearnos retos que poco después abandonamos, muchas veces porque son tan irrealizables que enseguida nos damos cuenta de ello.
La clave para que los retos que nos planteamos en 2019 puedan cumplirse está en tres palabras. Deben ser concretos, realistas y cuantificables.
Concretos. No se trata de volver a estudiar, hacer deporte o de perder peso en abstracto; sino, por ejemplo, de perder 5 kilos, estudiar un curso de inglés B1, comenzar a caminar 15 minutos al día o pasar de fumar sólo cigarrillos a 5 al día.
Además de ser concretos, los retos tienen que ser realistas. No podemos ser bilingües en 3 meses o bajar 10 kilos en un mes (son sólo ejemplos). Si nunca hemos estudiado inglés o cualquier otro idioma y partimos de “0” difícilmente lograremos pasar de un nivel A2 ó B1 en un año. Si nunca hemos hecho deporte, difícilmente conseguiremos un reto extremo. ¡Cuidado, realista no significa perezoso o mínimo! Significa conocer muy bien nuestro estado físico, nuestras posibilidades reales y adaptarnos a ellas, incrementando poco a poco la exigencia física (y mejor si lo hacemos con asesoramiento en el caso de la actividad física).
Finalmente, nuestros objetivos de 2019 tienen que ser cuantificables. Así podrás ir sumando (pasos caminados, días de ejercicio, libros leídos…) o restando (gramos o kilos, cigarrillos fumados, copas menos…), según el caso, ¡y eso te animará a seguir esforzándote en tu reto!
Aquí te dejamos diez posibles retos o propuestas para el año próximo (aunque seguro que tú tienes diez o veinte más).
- COME MÁS SANO. Se trata de un reto sencillo y complicado al mismo tiempo. Todos sabemos aquellos alimentos que tenemos desterrados de la dieta y aquellos otros que nos encantan y que no suelen ser los más sanos. Comienza por retos pequeños. Si no tomas nada de fruta, intenta tomarte una pieza al día y hacerlo de modo consciente ¡apúntalo y siéntete satisfecho!
- FUMA MENOS. Hay personas que consideran IMPOSIBLE dejar de fumar. A lo mejor no se trata de erradicar por completo, si te sientes incapaz de hacerlo; pero sí de reducir voluntariamente este hábito nocivo.
- TOMA MENOS ALCOHOL. Lo dicho en el anterior apartado se puede aplicar perfectamente a éste. Bebe menos, hazlo en ocasiones especiales y toma nota de ello.
- MEJORA TU FORMACIÓN. En la actualidad existen muchísimas posibilidades para formarse y en multitud de aspectos, además de forma gratuita en muchos casos. Los cursos MOOC son una buenísima opción que ponen en marcha muchas instituciones y que además acreditan la formación obtenida y te permiten aprender on line y a tu propio ritmo. Aquí te dejamos algunas plataformas donde te puedes informar más:
Junta de Andalucía – Fundación Telefónica – UNED
- SÍ, PRACTICA EJERCICIO. Hacer ejercicio es esencial para mantenernos saludables, sean cuales sean nuestras condiciones físicas, mentales o sensoriales. Si tienes dudas sobre cuál es el más adecuado para ti o sobre tus posibilidades y beneficios, consulta con tu médico. Existen numerosas asociaciones, grupos y entidades que promueven distintas disciplinas deportivas en el ámbito de las personas con discapacidad.
Te dejamos una tabla de ejercicios para personas con discapacidad.
- El de la lectura es uno de los hábitos que más se está perdiendo con las nuevas tecnologías, a pesar de sus numerosos beneficios. Leer estimula la concentración, la empatía y retarda el envejecimiento del cerebro, entre otras muchas cosas. Si eres un gran lector o lectora, tu reto es ser más selectivo con tus lecturas; si, por el contrario, no eres un asiduo a las letras, escoge algo de lectura sencilla y no excesivamente largo, los cómics son una buena opción.
- El baile es un excelente tipo de ejercicio físico, que además de fortalecer el corazón y prevenir la osteoporosis y el estrés, por ejemplo, estimula la memoria y también tiene efectos beneficiosos en la autoestima y en la pérdida de peso.
- HAZ ALGO POR LOS DEMÁS. Es muy sencillo: hacer algo por los demás contribuye a la propia felicidad. Además de eso, te ayuda a explorar tus límites, fortalece tus valores y experiencias vitales y las relaciones con los demás. Existen multitud de organizaciones en las que puedes prestar tu voluntariado, seguro que en tu propia ciudad. Puedes proponerte, por ejemplo, hacer también algo por el medio ambiente, reciclando en tu domicilio si todavía no lo haces.
- ASÓCIATE. Asociarnos, cualesquiera que sean nuestros intereses, nos ayuda a mejorar en nuestros objetivos y a incrementar el sentido de pertenencia a ese grupo que comparte. El trabajo en común, enriquece. Elige bien y participa.
- Conocer otras culturas, tradiciones y espacios nos enriquece y colabora a que adquiramos mayor perspectiva de nuestra vida y nuestro propio entorno. Eso sí, planifica bien para evitar sorpresas desagradables.
Feliz 2019, felices nuevos propósitos concretos, realistas y cuantificables.