Una posibilidad para pagar menos dinero por la hipoteca consiste en la subrogación de la misma. La subrogación de una hipoteca consiste en trasladar el préstamo hipotecario a otra entidad financiera, en la que ofrecen mejores condiciones. Si bien, esta modificación depende de determinados elementos establecidos por las entidades financieras.
En la mayoría de casos la subrogación de una hipoteca se produce para modificar sus condiciones financieras, como el tipo de interés o eliminar productos vinculados. También se lleva a cabo con el objetivo de ajustar los plazos de amortización. En definitiva, lograr unas mejores condiciones del préstamo hipotecario.
Por norma general, a la entidad bancaria a la que llevaremos la hipoteca le interesa captar un nuevo cliente, por lo que ofrecerá facilidades para ello. Sin embargo, es habitual que la entidad inicial ponga algún tipo de inconveniente respecto al proceso de subrogación, ya que por su parte no querrá perder a un cliente.
Subrogación de hipoteca a Banco Santander
Banco Santander incorpora un servicio en su página web en la que los usuarios pueden calcular cómo mejorarían sus condiciones en caso de trasladar la hipoteca a la entidad bancaria. En este sentido, simplemente es necesario tener en cuenta determinados elementos que interesen al cliente. Por ejemplo, el tipo de interés, vivienda habitual o segunda residencia o devolución.
Así, desde Banco Santander explican que en el proceso de subrogación de la hipoteca, asumen parte de los gastos de constitución de una hipoteca, entre los que se encuentra la notaría, gestoría y registro de la propiedad.
Desde la propia entidad bancaria argumentan que «si quieres cambiar tu hipoteca al Banco Santander, no necesitas tener el consentimiento de tu actual Banco. Presentada la solicitud en nuestras oficinas, te entregaremos una oferta vinculante en la que consten las nuevas condiciones; una vez que sean aceptadas por ti, pediremos a la otra Entidad un certificado de la deuda, que deberá entregarnos en un plazo máximo de 7 días naturales».
Una vez que se cumple este trámite obligatorio, el actual Banco tiene la posibilidad de realizar una contraoferta en 15 días naturales al siguiente. Así, una vez superado el plazo legal, ya es posible realizar la escritura de subrogación de la hipoteca.
Gastos de la subrogación
Hay que tener en cuenta que el proceso de subrogación de una hipoteca implica una serie de gastos, que se reparten entre el cliente y la entidad bancaria a la que se traspasa el préstamo hipotecario.
Los gastos que asume el cliente son aquellos relacionados con la antigua hipoteca, entre los que se incluye una comisión de subrogación o amortización anticipada. También se añaden gastos propios de la nueva hipoteca, como tasación de vivienda, aranceles notariales o nota simple actualizada del inmueble.
En el caso de Banco Santander, en el proceso de subrogación de la hipoteca, se encargaría de los gastos de gestoría, notaría y registro de la nueva hipoteca. Del mismo modo, también se responsabilizan del impuesto de Actos Jurídicos Documentados (AJD).