Renfe estrenará el próximo 6 de abril, coincidiendo con la Semana Santa, su servicio ‘low cost’ de alta velocidad, que se llamará AVLO. Lo anunció este miércoles el ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, en la presentación del nuevo proyecto en Toledo, en la que indicó que el servicio comenzará a operar en el corredor Barcelona-Zaragoza-Madrid, para “cuando se consolide el servicio”, extenderse a más usuarios. La venta de billetes comenzará a finales de enero y, según Renfe, paulatinamente a lo largo de 2020 y 2021 se extenderá a otros corredores del resto de España.
Con esta presentación, la operadora pública da el ‘pistoletazo de salida’ de la carrera hacia el AVE barato. «La Alta Velocidad ya no será un producto solo enfocado a viajes de negocios, sino que se abre a familias, a jóvenes y a otros colectivos que lo usaban de forma muy ocasional”, ha explicado el ministro de Fomento José Luis Ábalos. «AVLO es un nuevo producto comercial de alta calidad y precio reducido que democratizará la Alta Velocidad española”.
El AVLO será un tren modelo S112, tendrá un 20% más de plazas que los trenes habituales y no contará con clase preferente ni cafetería. Sin duda esto parece una buena noticia. Pero llegados a este punto conviene preguntarnos: ¿y los viajeros con movilidad reducida? Nada se ha dicho al respecto, algo totalmente incomprensible.
Cabe recordar que las plazas H, es decir asientos reservados para personas en silla de ruedas, tienen un número muy reducido en cada tren, unas dos por convoy. Debería aumentarse dicho cupo de plazas puesto que se suelen llenar con rapidez, dejando a las personas con discapacidad sin ninguna opción accesible. Y menos cuando, al eliminar el vagón preferente el cual suele ser más amplio, también se elimina otra opción para el viajero en silla de ruedas.
El transporte accesible como tal, es un derecho que todas las personas tienen para poder desplazarse libremente. Para ello todas las empresas y organismos implicados en el transporte deben tener esto como un principio, y que es nada menos que cuidar su accesibilidad para que una persona con discapacidad tenga plena movilidad para viajar a donde quiera o desee. Y esto lógicamente debe tenerse en cuenta en este nuevo servicio low cost de alta velocidad.
Porque abaratar costes para que más viajeros puedan usar este servicio no puede justificar el olvido al derecho de accesibilidad universal de las personas con discapacidad. Desde el Consejo Español para la Defensa de la Discapacidad y la Depemdencia (CEDDD) exigimos que este derecho, low cost o no, debe ser respetado y tenido en cuenta en este nuevo servicio ferroviario.