A pesar de que una parte de la sociedad sigue apostando por que el uso del dinero en efectivo está llegando a su fin, factores evidentes como que sigue circulando o que en casi todas las ciudades de España es relativamente encontrar un cajero automático, demuestran que esto no es así. Y es que aun hay muchos ciudadanos que prefieren este método de pago por encima de otros más modernos como las tarjetas bancarias o aplicaciones como Bizum.
Sin embargo, no podemos obviar que sí se ha mermado su uso a favor de otras fórmulas. Pues es un hecho que las nuevas tecnologías han llegado para aportar facilidad, eficiencia y además, de forma gratuita. Así que lejos de ir cargando con monedas y billetes, con una simple tarjeta o un teléfono móvil, se puede cumplir con la misma función. Por tanto, la teoría de que el dinero en efectivo pueda desaparecer, no es tan desorbitada.
No obstante, entonces, ¿Cómo se explica el segundo factor que hemos dado como evidente para demostrar que el metálico no va a desaparecer? Y es que cada vez es más fácil encontrar un cajero automático en cualquier lugar. La razón, además de que el dinero en efectivo se sigue usando, es que estos dispositivos han ganado protagonismo en cuando al uso que de ellos podemos hacer. Tanto es así, que muchos bancos han prescindido de personal de cara al público por estos aparatos.
Y es que la subsistencia del cajero automático está más que asegurada. Pues como hemos comentado, sus funciones han aumentado. Además de sacar dinero, podemos ingresarlo, poder revisar las cuentas y otras operaciones. Sin embargo, su mayor uso sigue siendo para retirar dinero en efectivo. Un uso que sin embargo, siempre conlleva una duda: ¿Cuál es el límite de efectivo que se puede sacar de uno de estos dispositivos?
Límite de dinero en efectivo que puedes sacar de un cajero automático
Es una práctica aún habitual sacar dinero en efectivo de un cajero automático. Y es que tal y como hemos visto, hay muchas personas aun que no quieren dejar de lado este método en favor de las nuevas tecnologías, por mucho que estas hayan avanzado. Sin embargo, hay un hecho de progreso que no pueden eludir: El uso de los cajeros automáticos. Estos dispositivos son la forma más factible de acceder a nuestro dinero en cualquier momento. Pero, ¿Podemos sacar todo el dinero que queramos?
El límite de dinero en efectivo que podamos sacar de un cajero automático depende de tres factores. El primero, la normativa de la propia entidad, pues cada una cuenta con un límite máximo establecido. El segundo factor es el más personal, pues cada persona puede establecer un límite en su tarjeta, que no le permita sacar más de una cantidad. Esto se hace por cuestiones de seguridad. Pero hay una tercera razón, que viene dada desde el Gobierno de España.
Y es que el Estado, ha aprovechado que cada vez se usa menos el dinero en efectivo, para modificar la legislación fiscal. De este modo, puede controlar más a fondo el metálico que se mueve. En cuanto al supuesto legal, la cantidad máxima que se puede retirar del banco sin justificar a la Agencia Tributaria, es de 3.000 euros. En el caso de querer sacar más, la entidad debe elaborar un justificantes con datos que luego debe enviar a Hacienda.
El límite establecido por BBVA
Teniendo en cuenta las limitaciones legales, los bancos no tienen más remedio que adaptarse y limitar en su entidad, siempre que respeten lo establecido en la normativa fiscal. Es decir, pueden establecer límites pero sin que estos lleven la contraria a la ley. Sin embargo, es habitual que muchas entidades bancarias decidan establecer límites menores con el objeto de evitar que se saque mucho dinero de una sola vez, pero también, por la seguridad del propio cliente.
Aunque esto depende de la entidad, lo habitual es que este límite esté encuadrado entre los 600 y los 1.000 euros, no obstante, como hemos comentado anteriormente, el propio cliente puede poner límite a su tarjeta y que esta cuantía sea más baja. En el caso particular de BBVA, el límite de dinero en efectivo que puedes sacar del cajero automático es de 2.000 euros.
