Si nos menciona la palabra tomate, seguramente pensemos en el típico tomate que solemos usar para guisar nuestras recetas o para preparar salsas para nuestras pastas, sin embargo este no es el único que existe, pues existe un fruto aún más exótico, que aunque es llamado de diferentes maneras, según la región, es llamado comúnmente como “tomate de árbol” o Solanum betaceum.
¿Qué es el tomate de árbol?
Conocido como tamarillo, tomatillo, tomate andino, tomate serrano, tomate de yuca, sachatomate o incluso berenjena, dependiendo de la zona del planeta en la que nos encontremos, este fruto que se cultiva mayormente en países tropicales del sur de América, en los que existen cultivos salvajes así como cultivos controlados.
Dentro de las características físicas del fruto podemos mencionar la textura firme de su corteza, mientras que en su interior se nos topamos con una textura gelatinosa con semillas comestibles.
En cuanto al sabor, tiene un tono agridulce, aunque en las especies más rojas se pueden percibir un sabor más dulce.
Propiedades
El tomate de árbol contiene una gran cantidad de fibra, pero sobre todo destaca la gran cantidad de antioxidantes.
También hay que señalar que tiene una gran cantidad de vitaminas, como por ejemplo la provitamina A, la vitamina B6, la vitamina C y la vitamina E, así como aporta distintos minerales, como el hierro, el calcio, el magnesio y el fósforo.
Por otro lado hay destacar que es una fruta con un bajo aporte calórico.
Beneficios del tomate de árbol
El tomate de árbol es tan saludable como exótico, y no es para menos si tomamos en cuenta todas las propiedades descritas.
1. Beneficia la digestión
Al contener bastante fibra contribuye con mantener un equilibrio del sistema digestivo, regulando el tránsito intestinal y mejorando los distintos procesos digestivos que suceden en dicho sistema.
2. Protege las células
Debido a que contiene una gran cantidad de antioxidantes permite contribuir con una reducción significativa que produce el llamado estrés oxidativo, manteniendo las células saludables y retrasando la aparición temprana del envejecimiento y mantiene el buen estado de la piel
3. Fortalece la salud cardiovascular
El consumo de tomate de árbol ayuda a reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, ya que ayuda prevenir la hipertensión, disminuye la cantidad de colesterol, permite regular la glucosa en la sangre y estimula el flujo sanguíneo, lo que también se traduce en un mejor funcionamiento del corazón.
4. Contribuye con la pérdida de peso
Tanto la fibra como el efecto desintoxicante del tomate de árbol contribuyen con la eliminación de la grasa corporal, así como previene la retención de líquidos, permitiendo que sea más difícil el aumento del peso corporal.
5. Protege la salud ocular
Permite restaurar las membranas que recubren los ojos, protegiéndolos de las distintas infecciones que puedan afectarlo, además de que disminuye las probabilidades de padecer cataratas y de que se presente la degeneración macular.
6. Previene el cáncer
Al ser un fruto rico en antocianinas y antioxidantes, contribuye con la reducción del riesgo de padecer cáncer, además de que contiene propiedades antiiniflamatorias que contribuyen con dicha prevención.