Las vitaminas son fundamentales para el funcionamiento general del organismo. Por ello, resulta fundamental seguir una alimentación equilibrada y completa que permita incorporar estos nutrientes de forma regular, con el objetivo de evitar cualquier deficiencia.
Entre ellas, encontramos la vitamina B12, que se trata de un nutriente clave para mantener la salud de las neuronas y la sangre. Sus funciones son numerosas, como ayudar a la formación del ácido desoxirribonucleico (ADN), material genético presente en toda célula.
La deficiencia de esta vitamina puede ser especialmente perjudicial para la salud sanguínea, puesto que es una de las principales causas del desarrollo de anemia megaloblástica; un trastorno de la sangre que ocasiona cansancio constante y debilidad.
Vitamina B12, memoria y Alzheimer
Diferentes estudios científicos han encontrado determinadas evidencias que pueden resaltar a la B12 como una vitamina importante para fortalecer la memoria e incluso para combatir una enfermedad neurodegenerativa como el Alzheimer.
Desde la Asociación del Alzheimer definen esta patología como «tipo de demencia que causa problemas con la memoria, el pensamiento y el comportamiento. Los síntomas generalmente se desarrollan lentamente y empeoran con el tiempo, hasta que son tan graves que interfieren con las tareas cotidianas».
Así, la B12 es un nutriente clave para la salud. Además, su deficiencia también se relaciona con problemas neuronales, demencia e incluso problemas relacionados con la memoria.
Al respecto, los profesionales de ‘MayoClinic‘ detallan que «no existen pruebas claras de que los suplementos de vitamina B-12 mejoren la memoria de las personas con enfermedad de Alzheimer«.
En cualquier caso, numerosos estudios resaltan la importancia de un nutriente como la vitamina B12 para el funcionamiento general del organismo; así como para prevenir el desarrollo de diferentes demencias.
Fuentes de obtención de la B12
Una de las características más importantes de la B12 es que es un nutriente que únicamente se encuentra de forma natural en alimentos de origen animal. Es decir, carne, vísceras, pescado, marisco, productos lácteos, huevos o embutidos.
Si bien, otra manera posible de incrementar los valores de vitamina B12 en el organismo es mediante el consumo de suplementos vitamínicos. En este caso, siempre es recomendable contar con la indicación y supervisión por parte de un especialista médico en la materia.
Los profesionales del Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos recomiendan que todas las personas consuman una cantidad idónea de B12 de forma diaria. Dicha cantidad dependerá principalmente de factores como la edad y el sexo.
Por ejemplo, en caso de personas adultas, tanto hombres como mujeres, se recomienda una obtención diaria de 2.4 mcg de vitamina B12. Para cumplir con las recomendaciones respecto a esta vitamina, lo más apropiado es seguir una alimentación equilibrada, saludable y completa.
Finalmente, los profesionales de la Clínica ‘Sanitas’, explican que la deficiencia de ácido fólico y vitamina B12 puede provocar diferentes síntomas neurológicos. Entre ellos destacan:
- Pérdida de memoria.
- Desorientación.
- Trastornos de la marcha.
- Entumecimiento y hormigueo de las extremidades.
- Desarrollo de un tipo de demencia vinculada a otros síntomas como depresión, episodios maníacos y psicóticos.
Además, estos expertos señalan que la falta de vitamina B12 puede ocasionar por sí mismo un tipo de demencia que se caracteriza por una disfunción cognitiva global, fallos en la memoria y pérdidas de concentración.