Siempre hablamos que el uso de la tecnología vinculado a la discapacidad es positivo, pues siempre mejora la inclusión de este colectivo. En este contexto ha nacido Freebe, que se define como la silla de ruedas autónoma que revoluciona la movilidad. Se trata de una silla de ruedas que combina tres características para contar con un sistema único en el mundo para acceder al coche en silla de ruedas, de forma completamente autónoma. Estos tres elementos son:
- Una silla de ruedas ajustable en altura
- Unas ruedas plegables
- Soportes telescópicos sobre los que apoyarse
Además, debemos de destacar que Freebe consta de dos elementos diferenciados, como es la silla de ruedas eléctrica y el asiento especial.
Silla de ruedas eléctrica
La silla de ruedes eléctrica es para uso interior/exterior, que como característica diferencial, permite el acceso a cualquier tipo de vehículo de forma autónoma, ya sea como conductor o como acompañante, sin esfuerzo alguno tanto en la entrada como en la salida.
En su opción básica, tiene como particularidad, la capacidad de adaptarse a cualquier altura y guardar en memoria las distintas posiciones para realizar transferencias, al sofá, la cama, el lavabo o el coche. Esta característica del sistema de elevación, facilita enormemente el acceso al coche sin necesidad de un sistema de grúa, ya que la silla sube por sí misma, al apoyarse en unos raíles telescópicos que se extraen del coche, para hacer la transferencia, al tiempo que las ruedas se pliegan para facilitar la entrada.
Por otra parte, las ruedas motrices retraibles, posibilitan superar otro de los problemas a los que se enfrentan las personas en silla de ruedas como son las aceras, que con este sistema se superan cómodamente, sin sobresaltos por peligrosas inclinaciones .
Asiento especial
Cuenta con un asiento especial para realizar la transferencia al coche. De esta manera, incorpora un asiento especial que sirve para cualquier persona, tanto si es el conductor, como el acompañante.
En caso de discapacidad, el asiento bascula para dejar a la vista unos raíles telescópicos, que se extraen manualmente para servir de soporte, sobre el que se elevará la silla de ruedas y una vez plegadas las ruedas, el propio usuario se introducirá manualmente en el coche sin ningún esfuerzo.
El coche requiere pues, una mínima adaptación y es plenamente funcional, sin pérdida de espacio.