Una madre, con graves problemas de movilidad desde que sufriera un accidente en 2006, ha perdido la custodia de sus dos hijos menores y se la ha otorgado en exclusiva al padre de los pequeños, condenado en firme por violencia de género y con dos órdenes de alejamiento.
Carlos Alberto Izquierdo, titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Palma de Mallorca, ha decidido retirar la custodia de los menores a la madre por el incumplimiento del régimen de visitas. La madre ha alegado en estas ocasiones problemas de salud, aportando partes médicos para acreditar su imposibilidad de acudir al punto de encuentro.
La Fiscalía tiene pendiente de recurso una petición que califica al progenitor como maltratador habitual, quien además tiene una orden de alejamiento sobre la mujer hasta 2023.
El juez ha estipulado en un primer auto un total de 22 traslados al mes al punto de encuentro y en segundo auto a 26 al mes a más de siete kilómetros de distancia, siendo difícil para la madre el desplazarse en su situación.
En esta circunstancia en la que por no cumplir podría perder la custodia de sus hijos, la madre acabó delegando en la abuela los desplazamientos de los menores al punto de encuentro con el padre.
La familia afectada ha manifestado que “no es una desatención o mal cuidado de los niños, sino todo lo contrario, es una discriminación por razón de la discapacidad con movilidad reducida de la madre”.