El reconocimiento de una incapacidad permanente puede derivar de accidente de trabajo, accidente no laboral, enfermedad profesional o enfermedad común. Además, una incapacidad permanente también puede ser causada por un ‘accidente in itinere’.
Un accidente in itinere es aquel que se produce fuera del lugar de trabajo, pero que se ocasiona cuando el trabajador iba de su lugar de trabajo a casa o de casa al lugar de su trabajo. Por norma general, un accidente in itinere se considera accidente de trabajo.
Incapacidad permanente por accidente in itinere
Los expertos de ‘CampmanyAbogados’ indican que «un accidente laboral in itinere tiene su razón de ser en el supuesto de que, de no haber habido la necesidad de que el accidentado acudiera a su centro de trabajo -o que volviera de él-, no se habría producido. Ni, por lo tanto, habría habido ninguna lesión por ese motivo».
Para que un accidente sea considerado ‘in itinere’ deben darse ciertas circunstancias claves. Así, una incapacidad permanente puede surgir debido a un accidente in itinere.
Estos son algunos de los requisitos que deben darse para que un accidente sea considerado como accidente in itinere en un proceso de solicitud de incapacidad permanente:
- El accidente debe haber ocurrido en un tiempo razonablemente próximo a la hora de entrada o salida del trabajo.
- La finalidad de dicho viaje debe estar determinada por el empleo.
- El punto de llegada o partida puede que no sea el domicilio del trabajador, siempre que no se rompa la relación con la actividad profesional.
El hecho causante es un aspecto determinante en los procesos de incapacidad temporal previo al reconocimiento de una incapacidad permanente. Además, en muchas ocasiones, si una incapacidad permanente deriva de accidente de trabajo, también es posible conseguir una indemnización económica.
Jurisprudencia de accidentes in itinere
Los profesionales de ‘CampmanyAbogados’ exponen algunos casos judiciales en los que se han considerado como accidente in itinere ciertos accidentes con características específicas. En este sentido, encontramos accidentes producidos cerca del domicilio del trabajador, en periodos de vacaciones y fin de semana, por desvíos permitidos, provocados por terceros o accidentes durante una estancia en hotel por motivo de trabajo.
Hay que tener en cuenta que los accidentes in itinere no solamente están relacionados con el domicilio habitual del trabajador. También se puede considerar como accidente in itinere el sucedido durante un desplazamiento de vuelta del fin de semana yendo directamente al trabajo.
Los expertos de ‘CampmanyAbogados’ explican que «no habrá accidente de trabajo si hay una agresión y esta responde ‘rencillas personales, ajenas al trabajo’. En cambio, sí lo habrá cuando el agresor no tenga relación alguna con el trabajador pero el incidente tenga lugar en el trayecto al trabajo». Todas estas circunstancias se deben tomar en consideración en un proceso de solicitud de incapacidad permanente.
Otra situación característica que puede darse es que una persona tenga un accidente durante una estancia en hotel por motivo de trabajo. En este tipo de casos, también se puede considerar como accidente in itinere. Sin embargo, los profesionales de ‘CampmanyAbogados’ advierten que «las enfermedades cardiovasculares constituyen el principal punto conflictivo en este asunto».
En definitiva, todos estos tipos de accidentes in itinere pueden provocar el reconocimiento de una pensión de incapacidad permanente, siempre que en el trabajador queden secuelas que le limiten en el ámbito laboral.