Rechazar una herencia es posible. De hecho, es una de las opciones que tiene una persona cuando se convierte en heredero. Al contrario de lo que muchas personas piensan, aceptar una herencia no es obligatorio. No obstante, esto no significa que exista la opción de desprenderse de la figura adquirida como heredero. Esto es algo que puede chocar, pero la opción que elijas con respecto a la herencia, la decides siempre desde la posición de heredero. Y es que el heredero, dispone de varias opciones desde dicha posición:
- Aceptar.
- Renunciar.
- Aceptar a beneficio de inventario.
Que existan varias opciones responde a la definición en sí sobre la herencia y lo que ello conlleva. Pues otro error común, es pensar que lo que se va a percibir, siempre son bienes. Pero no, el Código Civil deja claro que se pueden heredar todos los bienes, derechos y obligaciones de una persona que no se extinguen con su muerte. Es decir, se heredan tanto los activos (bienes), como los pasivos (deudas). Por tanto, hay quien puede decidir renunciar a su herencia por no comprometer su patrimonio particular.
Renunciar a la herencia en favor de los hijos
Como ya hemos adelantado, no siempre se acepta una herencia cuando nos corresponde. En ocasiones, también se renuncia. Uno de los motivos, es porque esta contenga deudas que puedan poner en peligro nuestro patrimonio, sin embargo, la práctica jurídica demuestra que hay más razones por las que una persona puede tomar esta decisión, por ejemplo, para que sean los hijos quienes hereden.
Y es que esta es una de las preguntas más realizadas en los despachos de los abogados expertos en sucesiones. ¿Puede un padre o madre renunciar a una herencia en favor de sus hijos? Pues hay respuesta para esto, pero no es extensible a todos los casos, pues en realidad, depende de un factor determinante: La existencia o no de testamento. Y es que este proceso de renuncia en favor de los hijos podría plantearse, en base a la existencia o no de este documento.
Cabe recordar, que el testamento es el acto mediante el cual, una persona puede dejar establecida en vida su voluntad, acerca de lo que quiere que ocurra con su herencia y quienes quieren que sean sus herederos, para que se cumpla una vez haya fallecido. Un acto que suele llevarse a cabo para evitar conflictos familiares, o para proteger a unos familiares por encima de otros.
La importancia de que exista testamento en estos casos
Quiero renunciar a una herencia que me corresponde en favor de mis hijos, ¿Es posible? Como ya hemos visto, renunciar a una herencia, es posible. Pero, cuidado. Es importante conocer las consecuencias de esta renuncia porque puede ocurrir que el objetivo que se persigue, no se cumpla. Es por ello que en estos casos, es fundamental, además de contar con un abogado experto en sucesiones, conocer si hay o no testamento.
El motivo es que si el causante fallece sin dejar testamento, si uno de sus hijos (heredero), renuncia con el objetivo de que sean sus hijos los que hereden (los nietos), le podría salir mal. Y es que en estos casos, la falta de testamento provoca que esa cuota de la herencia se reparta a partes iguales entre los hijos del causante, por lo que no pasaría a los nietos (o hijos del heredero que renuncia). Por tanto, en estos casos la única opción del heredero es aceptar su parte y donarla posteriormente a sus hijos.
¿Qué ocurre si existe testamento? Pues depende de lo que este disponga, puedes ocurrir dos cosas:
- Si en este no se contempla la institución de la sustitución vulgar, la renuncia tendría el mismo efecto que si no hubiese testamento (aumento de la cuota hereditaria del resto de herederos).
- Si en el testamento se contempla la sustitución vulgar, la renuncia del heredero convierte automáticamente herederos a sus hijos, con lo cual el problema se simplifica.