El Papa Francisco aplaudió este domingo durante el Ángelus «a todos los abuelos» y advirtió sobre las consecuencias de una sociedad que margina a las personas mayores. Según el Pontífice, de 87 años, «nuestro futuro depende en gran medida de cómo abuelos y nietos aprendan a convivir».
«En efecto, el abandono de los ancianos es una dura realidad a la que no debemos acostumbrarnos. Para muchos de ellos, especialmente durante estos días de verano, la soledad puede convertirse en una carga muy pesada», aseguró el Papa Francisco a unos quince mil peregrinos que lo escuchaban al mediodía bajo el sol en la plaza de San Pedro.
Las palabras del Papa Francisco para no abandonar a las personas mayores
Las palabras del Papa Francisco están vinculadas a la ‘Jornada Mundial de los Abuelos y de los Ancianos‘, establecida por él en 2021 y que la Iglesia Católica celebra este domingo. El lema de esta edición es ‘En la vejez no me abandones’.
«La Jornada de hoy nos invita a escuchar el clamor de los ancianos que dicen: ‘¡No me abandones!’ y a responder con firmeza: ‘¡No te abandonaré!’», ha añadido. Su propuesta es «fortalecer el vínculo entre nietos y abuelos, entre jóvenes y mayores». «¡Digamos ‘no’ a la soledad de las personas mayores!», ha exclamado.
En un mensaje en redes sociales para conmemorar esta jornada, el Papa ha señalado que «al estar cerca de los ancianos y reconocer el papel insustituible que desempeñan en la familia, en la sociedad y en la Iglesia, recibiremos numerosos dones, gracias y bendiciones».
El mensaje a los Juegos Olímpicos
Por otro lado, el Papa ha optado por no sumarse a las críticas sobre el tono ideológico de la inauguración de las Olimpiadas, aunque ha sugerido que no se desvíe la atención de los problemas más graves que afectan a la sociedad actual, como es el caso del abandono a las personas mayores, y no solo en verano, sino en cualquier época del año.
«Mientras en el mundo hay tanta gente sufriendo calamidades y hambre, se siguen fabricando y vendiendo armas, y se queman recursos para alimentar guerras, tanto grandes como pequeñas. Esto es un escándalo que la comunidad internacional no debe tolerar, y que va en contra del espíritu de fraternidad de los Juegos Olímpicos que acaban de comenzar», afirmó durante el Ángelus de este domingo. «No lo olvidemos, hermanos y hermanas: ¡la guerra es una derrota!», subrayó el Papa Francisco.