Las polillas suelen reinar en nuestro verano. Hablamos de insectos y bichos que con asiduidad suelen colarse en nuestro hogar de forma solitaria o mediante la llegada de plagas, que no son más que la acumulación de varios de esos insectos o polillas, en este caso. Lo curioso de todo es que en las semanas del verano hay más polillas, y es bueno reconocer cuáles son los motivos que llevan a uno de los insectos de moda a plantarnos todo tipo de incomodidades. En este artículo vamos a repasar cuáles son esas razones, y sobre todo también darte pautas para poder eliminarlas.
¿Sabes igualmente por qué las polillas van directamente a la luz? ¿Qué las atrae a nivel físico y natural? Es otra de las grandes preguntas que rodea el mundo de las polillas cuando es verano. Así que también es curioso conocer qué está detrás de este tipo de interrogantes que bien te pueden salvar una pregunta del Party o bien no arruinar un momento de calma y serenidad en las vacaciones que tendrás este verano.
Así explica National Geographic que las polillas siempre vayan a la luz
Seguramente habrás estado de camping, o directamente en un campo o en la calle, y habrás visto cómo las polillas van directamente a las farolas u otro tipo de lámparas que emiten una señal luminosa. Pues bien, la prestigiosa revista científica National Geographic detalla cuál es la clave real para entender este fenómeno, donde las polillas se sienten eminentemente atraídas por las altas temperaturas.
Pues no es otra que el brillo de la luna, por más romántico que pueda parecer. Al ser animales nocturnos, las polillas siempre han seguido la estela luminosa, de forma que siguen lo que National Geographic llama orientación transversal. Jeff Smith, que es el comisario de la colección de polillas del Museo Bohart de Entomología, cuenta que este mismo sistema de orientación transversal “es similar a cuando nosotros nos guiamos por la estrella polar, que está en un lugar determinado, de forma que sabemos dónde estamos”.
¿Por qué las polillas van a cualquier luz?
Lynn Kimsey, profesora de entomología de la Universidad de California y directora del Museo Bohart de Entomología, subraya que las polillas cuentan con elementos dentro de sus ojos sintonizados con la luz tenue que actúan como telescopios en miniatura.
Por lo que para las polillas supone un factor muy estimulante saber la cantidad de «lunas artificiales», según la propia Kimsey, que le proporcionamos a las polillas, ya sea en un camping cualquiera o en casa, que pueden ser grandes imanes de plagas de polillas especialmente en verano.