El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), es un organismo autónomo adscrito al Ministerio de Trabajo y Economía Social. De este modo, trabaja junto a los Servicios Públicos de Empleo de las Comunidades Autónomas configurando así, el Sistema Nacional de Empleo. El fin de la existencia de este organigrama no es otro que contribuir al al desarrollo de la política de empleo, gestionar el sistema de protección por desempleo y garantizar la información sobre el mercado de trabajo.
Por tanto, el papel del SEPE es fundamental en nuestro país. Cabe recordar, que España cuenta con uno de los índices de paro más alto de Europa. Un problema que se ve reflejado en la economía de todo el Estado y por ende, sufren muchos ciudadanos que no pueden mantener un buen nivel de vida. Así pues, para conseguir los objetivos anteriormente nombrados, el SEPE recoge una serie de ayudas para fomentar el empleo.
Y es que el objetivo de estas ayudas económicas, no es el de mantener a sus beneficiarios. Al contrario, es una prestación destinada a que quien la recibe, tenga un ingreso con el que subsistir, mientras encuentra la forma de volver al mercado laboral. Pues de otra forma, habría muchas personas en riesgo de pobreza y exclusión social, sin ninguna esperanza de salir de ello.
Por este motivo, entre los requisitos que establece el SEPE para poder acceder a una ayuda de este tipo, además de estar en situación de desempleo y no tener ingresos con los que poder mantenerse, están el hecho de tener que estar dado de alta como demandante de empleo y encontrarse en una situación activa de búsqueda del mismo. Esto significa, que el desempleado tiene la obligación de acudir a cualquier empleo, entrevista o curso, que beneficie este fin.
3 AYUDAS DEL SEPE PARA MAYORES DE 60 AÑOS
Si hay una franja de edad para la que las ayudas del SEPE son importantes, es para los mayores de 60 años. Y es que si el paro es un problema generalizado en España, llegados a dicha edad, el problema se acentúa considerablemente. Pues a pesar de la experiencia con la que cuentan estas personas, lógicamente, por los años vividos, las empresas son reticentes a contratar a las personas más mayores. La salud, el tiempo que resta para la jubilación y el precio de la experiencia, son a buen seguro motivos para que se de esta circunstancia.
Atendiendo a esta necesidad, el SEPE contempla tres tipos de subsidios diferentes para las personas mayores de 60 años, que estén en situación de desempleo y que hayan agotado el paro. Concretamente, estas ayudas son el subsidio para mayores de 52 años, el subsidio extraordinario por desempleo (SED) y la Renta Activa de Inserción (RAI). Todas tienen en común, que el importe mensual destinado al beneficiario es de 480 euros, es decir, el 80 por ciento del IPREM.
El primer que hemos nombrado, el subsidio para mayores de 52 años, es uno de los más beneficiosos para las personas de cierta edad. ¿El motivo? Que a diferencia del resto de subsidios por desempleo del SEPE, se cobra de forma permanente hasta que se llega a la edad de jubilación o se encuentra un empleo. Además, esta ayuda cotiza para la pensión de jubilación, por lo que contribuye a que su beneficiario no pierda ciertos privilegios ganados los años de trabajo.
OTRAS PRESTACIONES DISPONIBLES
Otras de las ayudas que contempla el SEPE para este sector de la población, es el Subsidio extraordinario por desempleo (SED). Este está pensado para que todas aquellas personas que han agotado el resto de prestaciones y subsidios, tengan un mínimo de ingresos. Una de las peculiaridades de esta ayuda, es que solo se puede pedir una vez en la vida. Por lo demás, tiene una duración de seis meses y para que te la concedan, debes demostrar rentas inferiores a los 810 euros al mes.
Finalmente, si tienes más de 60 años y estás sin trabajo, también puedes solicitar la Renta Activa de Inserción (RAI). Una ayuda que puedes percibir durante 11 meses, y que te pueden conceder tres veces en la vida, eso sí, no de forma consecutivas. Eso sí, existen algunas excepciones, como en el caso de las mujeres que han sufrido violencia de género, en la que si la conceden de forma continuada los 33 meses.