El jugo de durazno, es decir, el melocotón de toda la vida, es uno de los alimentos revelación esta temporada. Y lo es no sólo por su alta capacidad nutritiva, sino por su gran sabor. Acostumbrados al jugo de otro tipo de frutas, como puede ser la de naranja o el mango, por exponer algunas, el jugo de durazno aparece como una de esos grandes remedios naturales que rema siempre a favor de nuestro organismo.
Pues bien, hay quien aún no sabe todas las circunstancias que rodean a este alimento que puede servirnos de complemento perfecto para una dieta rica y saludable.
Porque en esta fruta está la posibilidad de crecer a nivel digestivo. Es decir, el jugo de durazno le conviene directamente todo lo que tenga que ver a nuestro intestino.
Por lo que resulta de gran ayuda no sólo para nuestra flora intestinal, sino que también ayuda a engrasar el desarrollo normal de la digestión y todo lo que la rodea.
¿Tiene calorías el jugo de melocotón?
Explica la Wikipedia que el durazno se conoce especialmente como prunus persica, originalmente Amygdalus persica, y comúnmente conocido como melocotonero.
También se suele denominar duraznero en países latinoamericanos y albérchigo en castellano antiguo. Su fruto es comúnmente conocido como durazno, pero en España claramente lo llamamos melocotón.
Se usa esta fruta en especial no sólo para alimentarnos, sino también en con fines estéticos, en la búsqueda de la belleza de la piel y el cuidado de las mismas.
Así que se convierte en un remedio natural más que resolutivo para multitud de situaciones. Y especialmente, porque carece de dos cosas que la hacen aún más especial:
- Hidratos de carbono
- Calorías
Por lo que la ausencia de estas sustancias que amenazan con el cuidado de nuestro equilibrio alimenticio hace que el melocotón sea uno de los mejores alimentos del momento.

Los grandes beneficios del jugo de durazno
Aporta, por su lado, fibra y nutrientes que ayudan a la regulación intestinal. Pero todavía le queda espacio para beneficiar a la circulación sanguínea.
Ayuda directamente a reducir nuestra presión sanguínea, y colabora en la prevención de futuras enfermedades cardiovasculares o infartos.
Al mismo tiempo, también trabaja en la destrucción de células cancerígenas, sobre todo del cáncer de mama, sin eliminar las células sanas de nuestro organismo. Eso no quiere decir que prevenga el cáncer, pero sí que ayuda en ese sentido.
El melocotón es ampliamente conocido por su capacidad de reforzar nuestro sistema inmunitario, por lo que sus propiedades antioxidantes son vitales para luchar contras las bacterias.
Luego, facilita funciones de nuestros riñones gracias a las propiedades diuréticas de esta fruta, por lo que ayuda a todo lo que tiene que ver con la vejiga.
Por último, hay especialistas que recomiendan esta fruta con el objetivo de bajar de peso gracias, en parte, a su alto contenido en fibra.