La Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (FAMMA-Cocemfe Madrid) comprueba que las actuaciones del Hotel RIU para subsanar las deficiencias de accesibilidad, denunciadas por esta Federación el pasado mes de agosto, no han sido subsanadas y siguen incumpliendo el Real Decreto Legislativo 1/2013, ya que no permiten el acceso a personas con discapacidad por las barreras arquitectónicas que contemplan dichas instalaciones.
Cuatro meses después, la Federación vuelve a denunciar ante la Oficina de Atención a la Discapacidad (Oadis) y al Consejo para la Promoción de Accesibilidad y Supresión de Barreras que el Hotel RIU Plaza de España no cumple la normativa vigente en materia de accesibilidad, basada en la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad de la ONU.
En la denuncia, FAMMA, destaca que el Hotel RIU no es accesible: ni en su entrada, por no estar automatizada la puerta y el botón de llamada estar mal colocado, en a mitad de una rampa; ni en el acceso para eventos y a la zona de compra de la entrada para subir a la terraza Skybar; ni tampoco el acceso a la plataforma de suelo acristalado, con visión 360o, ni en su entrada, por no de su terraza, al contar con tres enormes escalones.
El presidente de la Federación, Javier Font, “Es inconcebible la prepotencia del Hotel RIU que pretende saltarse la legislación impunemente gracias al ADA. Desde la Federación vamos a perseguir esta falta de respeto al marco legal existente y a nuestro colectivo, hasta las últimas consecuencias”.
ZONA DE EVENTOS Y COMPRA DE ENTRADAS AL SKYBAR
La entrada a la zona de eventos cuenta con un escalón y comparte el acceso con la venta de entradas para visitar el skybar, una oferta de ocio abierta al público en general. Se ha dado el caso de personas con discapacidad a las que se ha indicado que la entrada exterior es el único itinerario, sin dejar la alternativa de paso por el interior, por lo que las personas con discapacidad precisan de un acompañante para poder comprar la entrada, incumpliendo así la igualdad de derechos proclamada en la legislación en vigor.
ENTRADA INACCESIBLE
El pulsador recientemente instalado en la fachada, se encuentra en medio de la Rampa de acceso, a una distancia y posición que lo hace de imposible o muy difícil manipulación para personas usuarias de sillas de ruedas. La puerta no es de apertura automática, y dado que está instalada junto a la rampa, y sin meseta previa, su apertura automática es obligatoria según la normativa en vigor, y no una opción. Además, según el Documento de Apoyo DA DB SUA/2 se permite que la rampa no cuente con una superficie horizontal delante de la puerta, siempre que el mecanismo de llamada sea accesible desde una silla de ruedas y esté en el punto de arranque de la rampa, condiciones ambas que incumple el mecanismo actual.
SKYBAR
En el skybar (plantas 26 y 27) no existe ninguna barra de atención al público que cuente con una altura accesible para personas con discapacidad. Las barras no tienen menos de 3 m de longitud, por lo que no estarían eximidas según el contenido del DA DB/SUA 2 de contar con un punto de atención accesible. Estos elementos, recién instalados, no cuentan con ninguna protección patrimonial que justifique la falta de cumplimiento de la normativa en vigor.
PASO ACRISTALADO CON VISIÓN 360o DE MADRID
En el skybar existe una zona que cuenta con un paso acristalado sobre el vacío, y que constituye una gran atracción. Este paso se encuentra elevado sobre tres escalones en sus dos accesos, por lo que no es accesible para personas con discapacidad usuarias de sillas de ruedas. En el lugar del paso acristalado existía espacio suficiente para crear una rampa de acceso. Además, las escaleras no cuentan con los preceptivos pasamanos, ni con indicación podotáctil como exige la normativa, por lo que dificultan su localización y uso a
personas con discapacidad que puedan subir escalones.
USO DEL ASCENSOR
El uso de los ascensores, mediante tarjetas, puede no ser accesible para las personas con discapacidad sensorial, puesto que no se dispone de información táctil ni sonora en las pantallas de accionamiento y en el interior de las cabinas.
Javier Font finalizó destacando que: “Es triste para la ciudad de Madrid que los permisos de apertura de establecimientos se sigan otorgando sin cumplir la ley de accesibilidad. Abrir un negocio del nivel que sea, no autoriza a vulnerar derechos fundamentales de los ciudadanos, entre los que también se encuentran, las propias personas con discapacidad.”.
La reforma integral del edificio del hotel indica que se concedió una nueva licencia de funcionamiento, que debería cumplir con todas y cada una de las normativas en vigor. No es normal que un edificio que ha sido demolido en su interior íntegramente, contemple barreras de accesibilidad.
La Federación ha dado un plazo a la dirección del hotel RIU para subsanar estas deficiencias definitivamente porque, de no hacerlo, serán denunciados ante los tribunales.