El último escándalo racista está incendiando las redes sociales. Y no es para menos. Clifford Owensby, hombre con paraplejia, ha sufrido un abuso por parte de la Policía de Ohio, que lo ha sacado de su coche agarrándolo del pelo. Todo ello después de que les comunicará que no podía salir por sus propios medios.
Por tal motivo, la Policía de Dayton, en el estado de Ohio, ha anunciado la apertura de una investigación contra varios agentes.
El suceso tuvo lugar el pasado 30 de septiembre. El hombre con discapacidad fue parado cuando la policía quería registrar su vehículo en busca de drogas ilegales, tal y como informa la radio NPR.
Para llevar a cabo dicha acción, Clifford Owensby tenía que salir del coche, tal y como le pidió la policía. La respuesta de la persona con discapacidad fue clara. «No puedo salir. Soy parapléjico«.
La policía le dio una solución: que un agente le ayudara. Pero Clifford lo desestimó, ya que tenía miedo a que le hicieran daño.
A su vez, pidió lo que se conoce como «camisa blanca», que es la presencia de un supervisor de la Policía, pero los agentes le contestaron que lo solicitarán cuando saliera del coche.
Ante la negativa del hombre con discapacidad a salir del coche, uno de los policías se puso nervioso y lo amenazó a sacarlo a rastras. «Puedes cooperar y salir del coche o soy yo el que te saca. ¿Ves las dos opciones que tienes?», afirmaba el hombre con paraplejia.
Finalmente, los agentes acabaron agarrando a Clifford Owensby, tirándole de los brazos y del pelo mientras gritaba pidiendo ayuda. A su vez, lo inmovilizaban y le pusieron las esposas y lo alejaron del vehículo.
El suceso está bajo investigación: «Es muy preocupante»
Una vez que sacaron del coche al hombre con discapacidad, la policía registró el vehículo. En el interior había un niño de tres años en al asiento de atrás y 22.450 dólares.
Owensby fue multado por no llevar al niño con el respectivo cinturón de seguridad y por llevar las lunas tintadas. Además, se le culpa de obstrucción a agentes de la autoridad y por resistencia al arresto.
Por su parte, la alcaldesa de Dayton, Nam Whaley, ha calificado el incidente de «muy preocupante. Por eso la ciudad ha publicado de inmediato la grabación de la cámara corporal. Todos los implicados están siendo investigados».
Por su parte, el presidente de la Orden de la Logia Fraternal de la Policía de Dayton, Jerome Dix, ha defendido la actuación de los policías. «Cumplieron la ley, con su formación y con los procedimientos y políticas del departamento.
«A veces las detenciones de individuos que no colaboran no son bonitas, pero son necesarias para mantener la seguridad pública», finalizaba.