Dos personas han sido detenidas en Málaga capital por agentes del Cuerpo Nacional de Policía. A ambos personas se les acusa de presunta participación en un robo con fuerza en un establecimiento que alberga la sede de una agrupación de asociaciones de personas con discapacidad intelectual.
Las dos personas detenidas son un hombre de 50 años y nacionalidad española, arrestado en el interior del local; y una mujer, de 48 años, quien era conductora del vehículo y que realizaría funciones de vigilancia y apoyo.
Los hechos tuvieron lugar la noche del 2 de agosto, sobre las 04.15 horas, en la calle Marqués de Cádiz.
El CIMACC 091 recibió una llamada en la que una persona alertaba de que unos sospechosos estaban intentando acceder por la fuerza a un establecimiento cerrado al público. Además, se informaba sobre los datos de un automóvil en el que se habrían desplazado los intrusos.
Varias patrullas en servicio se dirigieron al lugar. Así, los agentes hallaron a su llegada una cadena fracturada que aseguraba la reja del local objeto de robo y, a continuación, la puerta abierta.
El interior del establecimiento estaba revuelto
Una vez dentro del establecimiento, que alberga la sede de una agrupación de asociaciones de personas con discapacidad intelectual, los policías observaron que el interior estaba revuelto.
Además, localizaron en un lado del pasillo, acumulados en un rincón, varios efectos de valor. Entre ellos se encontraba una televisión, un ordenador y un proyector, todo listo para ser sustraído del local, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.
Así, continuando con la requisa en el inmueble, los agentes localizaron, agazapado bajo una mesa, a uno de los asaltantes. De esta forma, le intervinieron materiales de oficina que ocultaba en el interior de sus bolsillos.
De igual modo, en una batida por la zona, una patrulla dio el alto a la conductora del vehículo. Y es que ya sabían las características puesto que se la habían transmitido por la Sala del 091. Según las pesquisas practicadas, la sospechosa, en labores de apoyo, sería cómplice del varón localizado dentro del establecimiento.
En el interior del maletero del coche, la Policía intervino una cizalla con presuntamente se habría cortado el candado de la persiana metálica.