El bicarbonato es un compuesto químico formado por carbono, sodio, oxígeno e hidrógeno. Así, es un elemento al que se le atribuyen diferentes beneficios para la salud como la cura de enfermedades o la pérdida de peso. Sin embargo, únicamente está comprobado sus efectos positivos para reducir la acidez estomacal.
Para conocer más sobre el bicarbonato de sodio y sus posibles contraindicaciones para la salud, tomamos como referencia las declaraciones de Andrea Calderón para ‘Infosalus’. Se trata de la secretaria científica de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA).
Al respecto, Andrea Calderón explica que «la gran mayoría de los beneficios que se hablan de él no son ciertos». Seguidamente añade que «la fama del bicarbonato de sodio se debe a sus efectos positivos a nivel de neutralizar la sensación de acidez estomacal principalmente, pero también a otras múltiples funciones que se le atribuyen y que no están científicamente demostradas».
Actualmente, esta experta en nutrición y dietética asegura que no recomendaría la ingesta de bicarbonato de sodio para algo que no sea la reducción de acidez estomacal.
Cómo tomar bicarbonato de sodio
En palabras de esta experta, la forma más recomendada para tomar bicarbonato de sodio es añadir una pequeña cucharadita disuelta en un vaso de agua y remover hasta hacer desaparecer la efervescencia. «Se recomienda tomarlo durante o justamente tras la comida que nos resulte indigesta», aconseja la doctora Calderón.
Sobre los posibles efectos secundarios del bicarbonato de sodio, Andrea Calderón señala que apenas existen y si los hay son muy poco improbables. Eso sí, siempre que su consumo sea moderado y siguiendo las indicaciones descritas en el párrafo anterior.
Contraindicaciones de tomar bicarbonato
En este sentido, es recomendable no abusar del bicarbonato de sodio y no tomar en cantidades elevadas, ya que en este caso si que puede generar importantes perjuicios para la salud. También es necesario prestar especial cuidado ante posibles interacciones con otros medicamentos.
Sobre este asunto, la doctora Andrea Calderón advierte que «Debemos evitar pasarnos o, sobre todo, evitemos tomarlo durante un tiempo prolongado para prevenir acidez. No es recomendable tomarlo asiduamente, sino mejor en momentos puntuales o unos días seguidos, pero no más de una semana».
Uno de los mayores problemas que pueden surgir de la ingesta prolongada de bicarbonato es la alcalosis sistémica. Así, antes de tomar este compuesto químico siempre es recomendable preguntar a un profesional sanitario que asesore y explique las posibles interacciones que puede tener su ingesta.
Por ejemplo, puede interaccionar de forma negativa con medicamentos antiinflamatorios no esteroideos, antibióticos u otros medicamentos altos en hierro.
En definitiva, el mayor problema es que «podría afectar de tal forma que aumente el efecto de estos fármacos o, por el contrario, que reduzca su utilidad. En el caso de tomar medicamentos con los que interacciona podremos tomar también bicarbonato, pero espaciado al menos dos o tres horas en el tiempo».
Por último, la ingesta bicarbonato no es recomendable para mujeres embarazadas o en lactancia materna, así como niños menores de 14 años. Además, tampoco deberían consumirlo aquellas personas con patologías renales, cardíacas, hipocalcemia o hipoclorhidria.