Las proteínas son uno de los macronutrientes más importantes para la salud. Concretamente, junto a las grasas y los hidratos de carbono son el macronutriente más relevante para el correcto funcionamiento del organismo en su conjunto.
Estos macronutrientes son sustancias nitrogenadas compuestas por aminoácidos, siendo algunos de ellos esenciales para la salud. Esto quiere decir que el organismo no tiene la capacidad para sintetizarlos, por lo que obtiene estas proteínas a partir de la alimentación.
Así, es necesario hablar de las proteínas vegetales, a las que se les otorga un menor valor nutricional que a las proteínas de origen animal. Sin embargo, son igualmente imprescindibles para el organismo.
El valor proteico vegetal
La presidenta del Colegio Profesional de Dietistas-Nutricionistas de Galicia, y miembro del Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas-Nutricionistas, María González, explica que consumir proteínas de forma regular no es sinónimo de consumir carne.

Al respecto, aclara que «se puede obtener de una gran variedad de alimentos, de los cuales muchos pueden ser de origen vegetal».
Las proteínas de origen vegetal están presentes principalmente en alimentos como los frutos secos, garbanzos, lentejas, alubias, guisantes, soja, cereales integrales, semillas o pseudocerales.
Por otra parte, es necesario tener en cuenta que las proteínas vegetales son de menor disponibilidad. Es decir, no se absorben igual de bien por parte del organismo. En referencia a ello, la doctora González explica que «según esto, se necesita algo más de cantidad para cubrir los requerimientos. Pero si llevamos a cabo una alimentación variada nos aseguramos el aporte de todos los aminoácidos esenciales. De hecho, se recomienda que al menos la mitad de la proteína que ingerimos sea de origen vegetal.
Además, la nutricionista María González argumenta que «con una dieta vegetariana variada, bien planificada y supervisada por un dietista-nutricionista, en caso de que sea necesario, se pueden cubrir perfectamente los requerimientos proteicos».
Proteína vegetal frente a la animal
Los alimentos que proporcionan proteínas de origen vegetal también suele ser ricos en minerales, fibras y vitaminas esenciales para el organismo. Por ello, al aumentar las proteínas vegetales también incrementamos otros nutrientes claves.
Además, la nutricionista María González expone que un consumo excesivo de proteínas de origen animal, principalmente las que proceden de carnes y derivados, pueden aumentar el riesgo de enfermedad cardiovascular, debido a la composición nutritiva de los alimentos que procede.
«Otro punto a favor de las proteínas vegetales es la potenciación de una alimentación sostenible puesto que requieren menor consumo de recursos (agua) y generan menos cantidad de gases de efecto invernadero. La producción de alimentos de origen vegetal supone un menor impacto medioambiental», expone la presidenta del Colegio Profesional de Dietistas-Nutricionistas de Galicia.
Si bien, también existen proteínas de origen animal que se encuentran en alimentos como pescados o el huevo, cuyas grasas son más cardiosaludables que las que se encuentran en la carne roja. Por tanto, no es necesario eliminar las proteínas de origen animal, ni mucho menos, si no de limitar su consumo.
Así, para aumentar la presencia de proteínas de origen vegetal en nuestra alimentación, la doctora María González recomienda incluir dos raciones de verduras y hortalizas al día; y unas tres piezas de fruta al día. También es aconsejable tomar legumbres como mínimo tres veces a la semana.