Las etiquetas medioambientales que se pegan en la luna delantera del coche han llegado para quedarse. Con el paso de los años las limitaciones empiezan a ser cada vez mayores y en los últimos tiempos desde la Dirección General de Tráfico (DGT) han intensificado las restricciones medioambientales, aplicando la «fumata negra» a vehículos con etiquetas menos eficientes, especialmente en Zonas de Bajas Emisiones (ZBE). Unas restricciones que han crecido en 2025 y que dejan un panorama muy complicado para millones de conductores.
Estas medidas, alineadas con la Ley de Cambio Climático, buscan reducir la contaminación en ciudades de más de 50.000 habitantes, afectando a millones de conductores. A continuación, detallamos las restricciones por etiqueta y los vehículos en riesgo, según fuentes oficiales de la DGT.
¿Qué restricciones por etiquetas medioambientales se aplican en 2025?
- Sin etiqueta (Categoría A): Los vehículos más afectados son los gasolina anteriores a 2001 (no cumplen Euro 3) y diésel anteriores a 2006 (no cumplen Euro 4). En ciudades como Madrid y Barcelona, estos coches están prácticamente expulsados de las ZBE, salvo excepciones para residentes empadronados hasta finales de 2025. Circular sin autorización conlleva multas de 200 euros.
- Etiqueta B: Incluye gasolina matriculados entre 2001 y 2005 (Euro 3) y diésel entre 2006 y 2013 (Euro 4/5). En 2025, ciudades como Bilbao prohibirán su acceso a ZBE desde abril, y Madrid restringe su circulación en zonas como Distrito Centro, exigiendo aparcar en parkings regulados.
- Etiqueta C: Abarca gasolina desde 2006 (Euro 4/5/6) y diésel desde 2014 (Euro 6). Aunque tienen menos limitaciones, en ZBE como Plaza Elíptica (Madrid) solo pueden estacionar en aparcamientos concertados.
- Etiqueta ECO y Cero Emisiones: Los híbridos, eléctricos y vehículos de gas (GNC/GLP) disfrutan de libre acceso y ventajas como descuentos en parkings regulados.
¿Qué coches están en peligro entonces?
Los vehículos sin etiqueta, que representan cerca de 8 millones en España, son los más vulnerables, especialmente los gasolina pre-2001 y diésel pre-2006. Los coches con etiqueta B, mayoritarios en el parque automovilístico, enfrentan un futuro incierto, con restricciones crecientes en 2025. En ciudades como Madrid o Barcelona, los conductores con etiquetas B se enfrentan a un futuro lleno de dudas. El envejecido parque automovilístico que tiene España deja a muchos conductores sin saber qué decisión tomar a la hora de comprar un nuevo coche. Desde organismos oficiales como la DGT recomiendan renovar el parque hacia modelos ECO o Cero para evitar sanciones.