Andalucía, la comunidad autónoma con mayor población de España, se enfrenta a un reto constante: atender adecuadamente a quienes dependen de terceros para desarrollar su vida diaria. Según datos de la propia Junta de Andalucía, más de 297.400 personas ya se benefician del sistema de atención a la dependencia, y se han tramitado más de 444.300 prestaciones.
La dependencia, tal como la define el organismo andaluz, afecta a aquellas personas que, por edad, enfermedad o discapacidad, necesitan de ayuda continua para tareas básicas como el aseo, la movilidad o la gestión doméstica. Esta situación puede deberse a una pérdida de autonomía física, mental o sensorial, lo que la convierte en una prioridad en términos de políticas sociales.
¿Qué grados de dependencia reconoce la Junta de Andalucía?
El sistema de atención a la dependencia distingue tres grados según la intensidad de la ayuda que necesita la persona afectada:
- Grado I: Dependencia moderada.
- Grado II: Dependencia severa.
- Grado III: Gran dependencia.
Estos niveles determinan tanto la cuantía como el tipo de prestación que podrá recibir el solicitante.
¿Cómo solicitar la Ley de Dependencia en Andalucía?
La Junta de Andalucía ofrece dos canales principales para iniciar el proceso:
- A través de la Ventanilla Electrónica de la Dependencia
Este sistema telemático está disponible las 24 horas del día, todos los días del año, y permite tanto la presentación inicial de la solicitud como la petición de revisión del grado de dependencia. Es el método más ágil y recomendado. - De forma presencial en los Servicios Sociales Comunitarios
En este caso, la persona interesada debe presentar la solicitud junto con un informe sobre su estado de salud, elaborado por un profesional del sistema sanitario. En los centros de servicios sociales, el personal está capacitado para orientar en la cumplimentación de la documentación necesaria.
Una vez entregada la solicitud, el proceso continúa con una única visita domiciliaria. Un técnico de la Junta se desplazará al domicilio para realizar la evaluación, explicar las prestaciones disponibles y elaborar, en conjunto con la persona solicitante, el Programa Individual de Atención (PIA).
Finalmente, se emitirá una resolución oficial en la que se reconoce el grado de dependencia y el acceso a las prestaciones, teniendo en cuenta tres criterios prioritarios:
- Grado de dependencia.
- Capacidad económica.
- Antigüedad de la solicitud.
Toda la información, incluyendo modelos de solicitud y vías de contacto, está disponible en la página oficial de la Junta de Andalucía.