El área de Promoción de la Autonomía Personal de la Confederación Gallega de Personas con Discapacidad de Galicia (COGAMI) es la que se encarga de gestionar todas las consultas que llegan a la entidad, aportando una respuesta a las personas con discapacidad y familias, con el fin de darle una solución a la problemática que tienen.
Durante el Covid-19 se remitieron a COGAMI un total de 210 consultas, transmitiendo preocupación por la falta de información, confusión sobre la pandemia y desconocimiento ante la manera de proceder. En las consultas, recibidas vía telefónica y correo electrónico, se aprecia el temor por cómo afectará al confinamiento a la salud mental de la propia persona y por cómo afrontar la situación.
La escasez de información sobre plazos y lugares de atención para la entrega de documentación en la Administración; la manera de proceder para solicitar la revisión del certificado de discapacidad en proceso de caducidad o ya caducado y cómo contactar con el SEPE para solicitar la prestación de desempleo, fueron otras de las preocupaciones transmitidas a COGAMI, junto con las consultas sobre la tramitación y cobros de los ERTES y el pago de alquileres de locales comerciales y viviendas.
El equipo formado por 11 trabajadoras sociales del área de Promoción de la Autonomía Personal realizó también un total de 1.032 seguimientos a personas usuarias y familias para conocer su situación y si presentaban alguna necesidad. De estos seguimientos, se aprecia que viven una situación de sobresaturación tanto las personas con discapacidad como sus familias, las personas mayores que viven solas o las cuidadoras principales de personas con discapacidad y/o en situación de dependencia (por ejemplo personas con Alzheimer, con enfermedad mental, etc.)
La ansiedad, un problema presente
El contacto mantenido con las personas mayores muestra que muchas tienen ansiedad, la necesidad de hablar con otra persona y de acompañamiento durante este proceso. COGAMI actuó de intermediaria entre las personas que demandaban una necesidad y las coordinaciones de los servicios sociales comunitarios, protección civil y otras entidades de atención, mediando en más de 100 actuaciones conjuntas.
Otras de las gestiones llevadas a cabo por COGAMI fueron 240 intervenciones sociales, siendo estas de acompañamiento a personas durante la crisis y de apoyo psicosocial, resultando beneficiarias un total de 331 personas. Como la atención personalizada no es posible tras el Covid-19, los medios empleados fueron el correo electrónico, los vídeos explicativos, la llamada telefónica, y las plataformas de Whatsapp y Skype, realizando 79 sesiones individualizadas y 5 sesiones grupales a través de videoconferencia.
Desde COGAMI se insiste en la necesidad de poner el foco en el grado de vulnerabilidad que tienen las personas con discapacidad. El equipo de COGAMI que conforma el área de Promoción de la Autonomía Personal aprecia un aumento en la crisis social, relacionada con el ámbito económico. Existe preocupación a que la merma de ingresos y la incertidumbre sobre el regreso al puesto de trabajo, deriven en una problemática de salud mental.
Ante la situación actual, para COGAMI, es necesario mantener estos servicios: la protección de las personas con discapacidad, mayores y/o con dependencia a través de cuidados domiciliarios; volver a retomar las valoraciones de dependencia y discapacidad y la gestión de prestaciones; romper con la brecha digital para aquellas personas que no tienen ni competencias ni recursos para el uso de las vías telemáticas; conseguir soluciones para las personas que viven solas o para aquellas que están aisladas en medio rural; ofrecer trato preferente para ayuda a domicilio de personas con discapacidad y la accesibilidad debe ser universal, debe llegar a todas las personas con discapacidad sin excepciones.