Lourdes Roig Pérez es la madre de Diego Redondo Roig, el pequeño de 11 años que ha fallecido con una grave lesión cerebral. Desde que tenía un año y medio, a raíz de un fatídico atragantamiento, ya luchaba contra esta enfermedad.
El pequeño se encontraba en un campamento en Gandía, cuando sufrió un paro cardiaco mientras dormía y no se despertó, como aseguraba el padre.
Ahora ha sido la madre quien, a través de un post en Facebook, ha hablado sobre la marcha de su hijo. «Has emprendido tu viaje hijo. Espero que sea un lugar feliz, sueño que reencuentres con grandes amigos. Pablo…tenéis tanto que contaros…Francina, Alba, tu yayo José, tus abuelos María y Jaro…».
Prosigue la madre añadiendo que «sueño que vuelvas a correr, hablar, reírte. A disfrutar de esa vida que aquí no pudiste tener».
«Te has ido rodeado de amor. Un inmenso amor de muchísimas personas, familias, amigos…Gente que sin conocerte ha estado junto a ti, dándote todo su apoyo y su luz durante años de lucha», asegura Lourdes Roig al hablar de su hijo Diego Redondo.
Diego Redondo, todo un «guerrero»
A pesar de tener tan solo 11 años, siempre será recordado como «El Guerrero», por su lucha, «Porque lo eras hijo, porque nos has enseñado a saber lo que es la fuerza, el tesón, la serenidad… La vida.»
La madre, asegura que, tanto su padre como ella, hicieron todo lo posible porque la vida de Diego Redondo Roig fuese la mejor. «No dejamos de intentarlo y eso me da paz. Eso y tu sonrisa. Tu forma de enseñarme el amor puro».
«Has sido lo más bonito de mi vida y lo seguirás siendo hasta el día que me reúna contigo. Pero mamá va a ser fuerte, al igual que yo te pedí que lo fueras, se que tú quieres que lo seamos», señala.
Además, indicaba que ahora, tras la pérdida del pequeño, «me toca aprender a lo único que no me enseñaste: a vivir sin tí. A no ver tu sonrisa torcida cada mañana al despertarte».
Por último, quiso dar las gracias a todos las personas que durante este tiempo han ayudado a la familia y se despidió lanzando un mensaje a su pequeño Diego Redondo: «Te quiero mi vida».