En muchas ocasiones se ha comentado la idea de lanzar una Tarjeta Europea de Discapacidad con la que se busca reforzar los derechos de este colectivo siempre que se encuentren dentro de la Unión Europea. Es decir, contar con este refuerzo de los derechos en las personas con discapacidad que viajan dentro de los países miembros de esta comunidad política europea. Ahora, desde Bruselas, la Comisión Europea ha propuesto que esta tarjeta sea una realidad.
Con esta Tarjeta Europea de Discapacidad se busca garantizar su acceso a condiciones especiales y un trato preferente, por ejemplo en el transporte o al asistir a espectáculos. Una tarjeta que favorecía a los derechos de las personas con discapacidad, mejorando su accesibilidad.
Desde la Comisión Europea, la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario responsable de Estado de derecho, Vera Jourova, ha indicado que «los derechos de las personas con discapacidad no deben detenerse en las fronteras nacionales. Queremos que estas personas viajen más fácilmente». Además, ha indicado que al presentar la iniciativa y confiar en que esta tarjeta ayude a hacer «desaparecer» muchos de los obstáculos que existen hoy en día.
Por su parte, Helena Dalli, comisaria de Igualdad, ha indicado que el reconocimiento mutuo de la condición de discapacidad en toda la Unión Europea supone «abrir las puertas de la libre circulación» a los ciudadanos europeos con discapacidad. Una manera de dejar de poner barreras para este colectivo y ayudar a su inclusión e la sociedad. Así lo ha destacado Dalli, ya que confía en que con este nuevo certificado se va a facilitar su «inclusión y plena participación» en la sociedad debido a que se va a favorecer a que tengan el mismo apoyo en todos los países del bloque.
UNA TARJETA DE DISCAPACIDAD PARA EUROPA
La realidad es que todavía esta Tarjeta Europea de Discapacidad es todavía un proyecto, que va camino de convertirse en realidad. En este sentido, la idea del Ejecutivo comunitario cuenta con detalles que aun deben ser aún negociados con el Parlamento Europeo y los Veintisiete.
Con esta tarjeta se busca un documento que sirva como prueba reconocida de discapacidad en toda la Unión Europea. Todo ello con el objetivo de conseguir tener acceso a las condiciones especiales o trato preferente en los servicios públicos y privados de destino, como en el transporte, eventos culturales, museos, centros deportivos o parques de atracciones.
Según ha anunciado la Comisión Europea, el carnet será expedido por las autoridades nacionales competentes y completará -o sustituirá– las tarjetas o certificados nacionales existentes, por lo que seguirán siendo las autoridades nacionales las competentes para conceder el estatus de persona con discapacidad.
Se pretende conseguir que la Tarjeta Europea de Discapacidad se facilitará tanto en formato físico como digital. Además, los proveedores de servicios deberán informar en formato accesible de las condiciones que se ofrecen a los titulares de la tarjeta.
Finalmente, y aprovechando la propuesta, Bruselas ha planteado una mejora de la actual Tarjeta Europea de Estacionamiento, que deberá tener un formato común obligatorio en toda la UE. De esta manera se sustituirá a las tarjetas de estacionamiento nacionales para las personas con discapacidad y será reconocida en toda la UE.