Su nombre es Amy Bockerstette, aunque todos la conocen como ‘Amazing Amy’ (La increíble Amy). Se trata de una joven con síndrome de Down que demuestra tener una gran habilidad para jugar a un deporte tan famoso como el golf.
Tan buena es en este deporte, que Amy ya es todo un ejemplo para todas las personas con Síndrome de Down, pues ha vuelto a mostrar al mundo que las barreras se pueden derribar.
Amy Bockerstette se ha convertido este 2021 en la primera persona con síndrome de Down en competir en un campeonato atlético universitario nacional.
La bonita relación con su padre
Actualmente, ‘Amazing Amy’ tiene 23 años, pero su vinculación al mundo del golf comenzó desde muy pequeña. La pequeña Amy encontró la pasión en un deporte donde han surgido grandes estrellas como Severiano Ballesteros, Tiger Woods o actualmente Jon Rahm.
Si bien, Amy Bockerstette mantiene una relación especial con su padre, que además es su caddie en los torneos de golf. «Me encanta estar con mi papá. Es un tipo asombroso. Es mi mejor padre», aseguró ‘Amazing Amy’ en una entrevista con CBS News.
Además, su padre, Joe, explica que «alguno de los momentos más divertidos de mi vida han sido en un campo de golf con ella».
Amy aprende de su padre, al que admira desde pequeña. Pero Joe también aprende constantemente de su hija, quién confiesa que le enseña una lección de vida día a día.
«Pasas por un duelo temprano por lo que has renunciado por tu hijo con discapacidad. Lo que aprendí posteriormente es que fue bastante tonto. La lección es que no se pueden poner límites a las personas. Fue ridículo para mí pensar que Amy no pudo lograr lo que logró», explica el padre de Amy Bockerstette .
Un ejemplo para todas las personas con síndrome de Down
Amy Bockerstette nació en Fort Wayne, Indiana (Estados Unidos), y no solo se ha convertido en un símbolo en su país, si no en prácticamente todo el mundo.
Desde muy joven, Bockerstette se ganó el apodo de ‘Amazing Amy’, ya que logró clasificar dos veces para el torneo de escuelas secundarias del Estado de Arizona y fue nombrada como una de las diez atletas más fascinantes del año 2017.
Probablemente, uno de los momentos más especiales a lo largo de su trayectoria fue cuando sorprendió al golfista profesional Gary Woodland en 2019. Delante de sus ojos, Amy hizo par en el hoyo 16 del TPC Scottsdale, uno de los circuitos más complicados.
Así, Amy confiesa que una de las grandes cosas que le proporciona el golf, además de la realización del deporte que ama, es conocer nuevas personas.
Desde hace unos años la pequeña Amy pasó a convertirse en ‘Amazing Amy’ y este 2021 ha sido noticia por convertirse en la primera persona con síndrome de Down en competir en un campeonato atlético universitario nacional. Todo un ejemplo a seguir en el mundo de la inclusión y la accesibilidad para personas con discapacidad.