El II Plan de Empleo de Personas con Discapacidad en Andalucía 2024-2028, la nueva planificación estratégica que desarrollará la Junta de Andalucía para favorecer la inclusión laboral de este colectivo, beneficiará a más de 161.000 personas con diversidad funcional. Se trata, según se desprende del informe preliminar del estudio de diagnóstico que acompañará a la formulación de este plan, del número de personas con discapacidad que, estando en edad de trabajar en Andalucía (380.700 según la Encuesta de Población Activa), pueden hacerlo.
El informe, presentado a entidades durante unas jornadas participativas coordinadas por el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) en Sevilla bajo el lema ‘Distintas capacidades, un mismo compromiso’, es un análisis cuantitativo y cualitativo de la situación que afecta a la empleabilidad de las personas con discapacidad en Andalucía e identifica los problemas, necesidades y retos. Según los datos recogidos en el informe, referidos a 2022, el número de personas con diversidad funcional que trabajan en la comunidad ascienden a 76.700 (menos de la mitad de las que pueden hacerlo), 36.300 se encuentran desempleadas y 13.000 están estudiando.
Tan solo 1 de cada 5 personas con discapacidad tiene trabajo en Andalucía
El diagnóstico muestra que sólo el 20,15% de las personas con discapacidad en la comunidad están ocupadas, frente al 60,23% de la población general y la tasa de paro (32,15%) es 13 puntos porcentuales superior a la general. Aunque presentan un nivel formativo más bajo, los registros alcanzan niveles menos igualitarios a medida que aumenta la formación, de manera que sólo el 14,19% de personas con discapacidad alcanza niveles iguales o superiores a Secundaria.
En cuanto a las formas de ocupación, el informe indica que la mayoría de los incentivos al empleo para las personas con discapacidad están dirigidos al empleo protegido (más de 88 millones de euros el pasado año) en Centros Especiales de Empleo y enclaves laborales, frente a los destinados al acceso en empresas ordinarias (214.000 euros en 2023). En Andalucía, el empleo público de las personas con discapacidad alcanza el 21% en relación a su peso poblacional, lo que muestra la eficacia de los cupos de reserva y cuota, mientras que el autoempleo tan sólo alcanza a un 8,82% del colectivo.
Las jornadas participativas han contado con de casi un centenar de personas y han sido inauguradas por la viceconsejera de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo, Beatriz Barranco, quien ha destacado que la formulación de este II Plan pivotará sobre un proceso participativo que implica la colaboración activa de diversos actores, y ha insistido en que la elaboración de políticas públicas inclusivas «no puede ser un esfuerzo aislado desde la Administración Pública».
Barranco ha hecho referencia a que «la inclusión de las personas con discapacidad en el mercado laboral no es sólo una cuestión de justicia social», sino también una oportunidad para enriquecer nuestra economía y fortalecer nuestro tejido social, y ha apostado porque la nueva planificación responderá a las necesidades, problemas y retos laborales reales de las personas con discapacidad en Andalucía.
Principales problemas y retos
En este sentido, el informe preliminar apunta como principales problemas a los que se enfrentan la falta de información sobre las capacidades de las personas con diversidad funcional y la falta de formación reglada, adaptada según los distintos perfiles y contenidos, además de las barreras que presenta la digitalización en los procesos de búsqueda de empleo. Entre los principales retos identificados en este trabajo preliminar, destacan el favorecer una mayor participación de las personas con diversidad funcional en el mercado laboral y disminuir las desigualdades laborales entre hombres y mujeres con discapacidad.
Respecto a la participación de las personas con discapacidad en las políticas activas de empleo, el diagnóstico recoge que durante 2022, un total de 18.971 personas se beneficiaron de las medidas de apoyo a la creación de empleo puestas en marcha por el SAE, entre ellas, las 17.870 personas beneficiarias de medidas de creación y mantenimiento de empleo indefinido. También durante ese año 14.319 personas con discapacidad participaron en un Itinerario Personalizado de Inserción en el programa Andalucía Orienta y 10.741 fueron derivadas al programa de Acompañamiento a la inserción. Finalmente, en torno al 30% de las personas beneficiarias del programa de Experiencias Profesionales para el Empleo fueron personas con diversidad funcional.
Corregir desigualdades y apoyar la participación
La finalidad de este II Plan de Empleo es promover la inserción laboral, corrigiendo la desigualdad de oportunidades laborales de las personas con discapacidad, apoyando su participación en el mercado de trabajo y promoviendo el empleo de calidad a través de varios objetivos estratégicos.
Por un lado, la puesta en marcha de medidas encaminadas a responder a sus necesidades específicas en los ámbitos de la formación para el empleo, la formación profesional, la orientación, la intermediación y el acompañamiento a la inserción, así como la puesta en marcha de políticas activas de empleo que potencien la presencia de estas personas en el mercado laboral, tanto ordinario como protegido, y el fomento de medidas de discriminación positiva y participación en el empleo público.
Por otro lado, el nuevo Plan persigue disminuir las desigualdades asociadas al sexo y la discapacidad en el ámbito del empleo, introduciendo la perspectiva de género, y, por último, atender específicamente las situaciones de discapacidad que conlleven mayores dificultades de inserción laboral. La coordinación del II Plan corresponde a la Consejería de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo, a través del Servicio Andaluz de Empleo.