El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) ha reclamado que cualquier estrategia de movilidad urbana se condicione al presupuesto de la accesibilidad universal para todas las personas con discapacidad. Y es que, a su juicio, «a día de hoy no se garantiza la seguridad de los desplazamientos en el diseño, gestión y uso de las ciudades».
Así lo ha manifestado el asesor jurídico de CERMI Estatal y presidente de CERMI Comunidad de Madrid, Óscar Moral. Todo ello durante su intervención en el VI Encuentro de Ciudades para la Seguridad Vial y la Movilidad Sostenible ‘Ciudades 2030’.
Este acto se ha celebrado en Zaragoza y ha sido organizado por la Dirección General de Tráfico (DGT); el Ayuntamiento de Zaragoza y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).
Este VI Encuentro se concibe como un foro de debate para el análisis de la movilidad y la seguridad vial urbana, apostando por la accesibilidad. Todo ello con el objetivo de difundir, promover e impulsar buenas prácticas y experiencias de seguridad vial y movilidad sostenible.
Y es que, este año arranca:
- El Segundo Decenio de Acción para la Seguridad Vial, adoptado por Naciones Unidas,
- La Estrategia de Seguridad Vial de la Unión Europea,
- La estrategia de Seguridad Vial de España.
Apuesta por la accesibilidad y la seguridad
Por ello, durante su intervención, Moral ha defendido un modelo de ciudad basado en la accesibilidad y la inclusión. «Este debe ser el objetivo fundamental en todas las estrategias de movilidad», ha declarado.
«La seguridad no está garantizada para los peatones con discapacidad con elementos como bicicletas, motocicletas o patinetes eléctricos y debemos trabajar en esa dirección para fomentar itinerarios accesibles en las ciudades», ha subrayado.
De hecho, en el último tiempo, la movilidad ha cambiado, abriendo paso a otros medios de desplazamiento más acordes con la sostenibilidad y el medio ambiente, y apostando por la accesibilidad.
En este sentido, ha declarado que es imprescindible que exista una “regulación clara y contundente” que garantice la seguridad con los nuevos elementos de transporte, su uso y su estacionamiento para que no “dificulte el tránsito en las ciudades de las personas con discapacidad”.