Cuando una persona se lleva trabajando toda la vida, piensa en que jubilación le va a quedar. Si atendemos a lo que dice la Seguridad Social y el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) es muy importante tener en cuenta que existen diferentes posibilidades a aumentar la cuantía de la pensión de jubilación, que siempre se aplican a la pensión contributiva.
Y es que debemos de tener en cuenta que la pensión no contributiva, que gestiona el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO), tiene una cuantía fija, que no varía en función de la cotización de cada persona, cosa que si ocurre en las contributivas.
Desde la Seguridad Social señalan que la jubilación es una prestación económica que «trata de sustituir las rentas del trabajo por una pensión vitalicia, única e imprescriptible, cuando el trabajador a causa de la edad cesa total o parcialmente en su actividad laboral».
A continuación vamos a ofrecer las diferentes opciones que tenemos para aumentar la pensión de jubilación.
JUBILACIÓN FLEXIBLE
Una de las opciones que ofrece la Seguridad Social a la hora de aumentar la cuantía de la pensión es que permite al jubilado compatibilizar la jubilación con un trabajado a tiempo parcial. De esta forma se seguirá cotizando y una vez finalice ese periodo se recalculará la pensión.
En la web informan que las personas que opten por la jubilación flexible deben saber que solo es posible trabajar como empleado a media jornada o un máximo del 75 % de la misma. Además, es importante tener en cuenta que cuando se está en jubilación flexible se va a cobrar el 50 % de la cuantía de la pensión o la parte proporcional a la que esté trabajando.
RETRASAR LA EDAD DE JUBILACIÓN
También podemos aumentar nuestra pensión con el retraso de la edad de retiro de su trabajo. En este sentido, a más años que se retrase la jubilación, mayor será la cotización por lo que la nómina de la pensión se vería incrementada.
De esta manera, hay que tener en cuenta cual es el mejor momento para jubilarse y optimizar el cobro de la pensión. Y es que, no por retrasarlo más, será más beneficioso.
EL CONVENIO ESPECIAL CON LA SEGURIDAD SOCIAL
El trabajador puede llegar a un acuerdo con el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), con el que se sigue pagando las cuotas de la Seguridad Social y de esta manera poder tener derechos a solicitar prestaciones y pensiones. Es decir, seguir cotizando.
De esta manera, el trabajor/a que le falte unos años de cotización podrá afrontar el pago de esta cuota para así conseguir una pensión más positiva. Entre los requisitos que se exigen para acceder a este convenio encontramos el de cotizar un mínimo de 1.080 días durante los 12 años anteriores a la solicitud de la pensión de jubilación.
LA INTEGRACIÓN DE LAS LAGUNAS DE COTIZACIÓN
Esta ayuda va dirigido para las personas se da el caso de una persona que, por cuenta ajena o por cuenta propia, no ha cotizado para la Seguridad Social. Es decir, que ha estado sin estar de alta y sin cotizar.
Por lo tanto, las lagunas de cotización son unas ayudas que permiten poder declarar por la base de cotización mínima aquellas lagunas en la vida laboral de trabajador. De esta manera se podrá conseguir declarar aquellos meses en los que no se estuvo dado de alta y aumentar la pensión de jubilación.