La Universidad Católica de Murcia (UCAM) ha señalado que una investigación liderada por el grupo ‘Nutrición, Estrés Oxidativo y Biodisponibilidad’ ha concluido que más del 70% de los adultos con Trastorno del Espectro Autista (TEA) tiene problemas de sueño.
En este trabajo, como señala la institución docente en un comunicado, se ha buscado el análisis de la evolución del sueño en personas con autismo desde la infancia hasta la edad adulta. En este trabajo han participado investigadores de:
- UCAM
- Universidad Autónoma de Madrid, la Universidad de Murcia
- Universidad la Trobe de Melbourne
- Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (CIBERSAM)
- Hospital General Universitario Dr.Balmis
Más del 70% de los adultos con autismo tiene problemas de sueño
Según explica la universidad en una nota de prensa, se ha indicado que en este trabajo se ha utilizado un dispositivo de monitorización circadiana ambulatoria. Para ello, se ha llevado a cabo una investigación ha analizado el descanso nocturno, la actividad diurna y el ajuste ambiental del horario habitual de sueño en 214 personas con TEA, con y sin discapacidad intelectual, agrupadas por franjas de edad.
La UCAM ha indicado que el objetivo de esta trabajo ha sido comprender cómo se mantienen y manifiestan los trastornos del sueño a lo largo de los años, así como el papel que juegan las condiciones de vida. Además, el estudio ha encontrado alteraciones significativas en la calidad del sueño en todos los grupos, especialmente en los adultos, quienes tardan más en dormirse y se despiertan con mayor frecuencia durante la noche.
El resultado era que solo un 26% de los jóvenes y un 28% de los adultos presentaban una eficiencia del sueño dentro del rango considerado normal. Si nos centramos en los niños, aunque el tiempo total de sueño se aproximaba a lo recomendado, más del 55% no alcanzaba los estándares esperados.
El horario del sueño cambia en función de la edad de la persona
Un cambio que los expertos han notado es que el horario natural del sueño cambiaba a medida que aumentaba la edad. El inicio del sueño más tardío en niños y adolescentes, con un centro de sueño en torno a las tres de la madrugada, y más temprano en los adultos mayores.
Pura Ballester, investigadora principal del estudio, ha señalado que «gracias al apoyo de dos proyectos de la UCAM y la estrecha colaboración con centros de la Región de Murcia, queremos ahora explorar dos aspectos del sueño. Por un lado, cuándo la vida en la residencia genera ese adelanto de la fase de sueño en los adultos jóvenes y, por otro lado, cómo afecta el sueño a la funcionalidad del día siguiente».
De esta manera, el trabajo aporta evidencia sobre una problemática que afecta de forma transversal a las personas con TEA. Además, subraya la necesidad de adaptar entornos y rutinas para favorecer un descanso reparador.
Por parte de la UCAM, han participado también investigadoras como Ana María García, María Luisa Sánchez de Ocaña, Desirée Victoria Montesinos, Cristina López Anguas y María Dolores Meseguer.