Los triglicéridos son un tipo de grasa presente en la sangre y que permiten al cuerpo generar energía para nuestro cuerpo. En sus niveles adecuados, los triglicéridos resultan imprescindibles pero si los descuidamos podemos experimentar algunos problemas en la salud cardiovascular. Por ello, es importante que conozcamos los beneficios del ejercicio físico a la hora de mantener controlados los triglicéridos.
Entre las principales causas que elevan exponencialmente los triglicéridos se encuentran el sedentarismo y los malos hábitos alimenticios. La inactividad física es un factor determinante para las enfermedades cardiovasculares, un hecho que influye y potencian otros factores de riesgo que se agravan si no cuidamos nuestra alimentación.
Es vital permanecer activos físicamente, ya sea para controlar nuestro peso, mejorar el estado del corazón o reducir los niveles de triglicéridos. Esto nos ayudará a prevenir problemas que puedan ser aún más graves, e incluso, irremediables si no los controlamos a tiempo.
¿Cómo bajar los triglicéridos a través del ejercicio físico?
Para lograr obtener todos los beneficios que nos aporta el ejercicio físico, no es necesario hacer un esfuerzo físico excesivo. Lo ideal es ajustar el ritmo de ejercicio a las características personales de cada uno.
Si vamos a empezar a realizar algún tipo de actividad deportiva para mantenernos en forma, lo recomendable es hacer actividades de bajo esfuerzo como andar, jugar al pin pon, bricolaje, limpieza o cualquier actividad que te permita estar en movimiento sin cansarnos demasiado.
No obstante, si nos sentimos preparados para iniciar una actividad moderada podemos elevar el ritmo de nuestro paseo, bailar, arreglar el jardín, patinar o jugar al tenis. Estas actividades, por cotidianas o sencillas que parezcan, ayudan sumamente en la labor de mantenernos activos para que nuestro cuerpo no eleve los triglicéridos en exceso.
Por último, las actividades que mejor funcionan para reducir los triglicéridos son las que exigen un grado de intensidad más alto. Aquí entran actividades como correr, jugar al fútbol, ir al gimnasio o nadar. Estas requieren mayor desempeño físico pero también son las que más grasa nos permiten quemar.
Beneficios del ejercicio físico en los triglicéridos
El ejercicio físico prima al organismo de una serie de innumerables ventajas, pero estos son los principales beneficios que aporta para frenar el avance descontrolado de los triglicéridos:
- Disminuye el riesgo de sufrir problemas de corazón: Hacer ejercicio de forma frecuente permite a disminuir el pulso, siendo menor el número de latidos cardíacos por minuto, lo que permitirá que el corazón trabaje menos para conseguir el mismo rendimiento
- Aumenta el rendimiento de los pulmones: Permite aumentar la capacidad pulmonar gracias al esfuerzo realizado durante la práctica deportiva.
- Previene la obesidad: El ejercicio físico provoca un mayor gasto de calorías, por lo que el consumo calórico en la dieta será aún mayor. De hecho, el ejercicio aumenta la masa muscular, siendo un tejido que consume muchas calorías para funcionar, lo que evita que este exceso calórico se termine convirtiendo en grasa.
- Frena el colesterol: Reduce el colesterol total y los niveles de triglicéridos, aumentando la proporción del llamado colesterol «bueno» HDL.
- Retrasa la aparición de diabetes tipo 2: El ejercicio permite una mejor entrada de glucosa en las células, por lo que retrasa la posible aparición de la diabetes tipo 2.
- Reduce la tensión arterial: Hacer ejercicio físico todos los días favorece la dilatación de los vasos periféricos, lo que ayuda a la larga ayuda a disminuir la tensión arterial.