Para obtener un certificado de discapacidad en España es necesario seguir un procedimiento específico. La solicitud de este certificado se debe realizar en los servicios sociales de las comunidades autónomas, y no a través de la Seguridad Social.
Los profesionales de ‘CampmanyAbogados’ explican que «las personas con discapacidad son aquellas que presentan deficiencias físicas, mentales, intelectuales o sensoriales que se prevén como permanentes. La discapacidad, además, también implica barreras de participación en la sociedad, desde la perspectiva de la plena igualdad de condiciones».
Obtener un grado de discapacidad
El grado de discapacidad en España se expresa en forma de porcentaje. Actualmente, el grado mínimo para considerar a una persona con discapacidad es del 33%. Así, las personas con una discapacidad igual o superior al 33% pueden disfrutar de diferentes beneficios sociales y fiscales.
Para conseguir un certificado de discapacidad de al menos el 33%, es necesario superar un proceso de calificación por parte de profesionales. En este sentido, es necesario evaluar las limitaciones en la actividad y restricciones en la participación que pueda experimentar la persona.
Del mismo modo, las personas responsables de determinar una calificación, también tienen la obligación de analizar otros factores contextuales y/o barreras que puedan afectar en la vida cotidiana de la persona.
Hay que tener en cuenta que el proceso para solicitar el certificado de discapacidad puede variar en función de la Comunidad Autónoma en la que se solicite. Sin embargo, en términos generales, el procedimiento de solicitud es similar en todas las zonas de España.
Pasos para solicitar un certificado de discapacidad
A continuación, vamos a explicar los pasos a seguir para obtener un certificado de discapacidad en España. En primer lugar, es necesario superar una evaluación multidisciplinaria.
Es decir, el ciudadano debe presentar inicialmente la solicitud a través del modelo oficial. Tras un estudio de la situación del ciudadano, los responsables de cada Comunidad Autónoma tendrán que emitir un dictamen médico.
Por su parte, el segundo paso consiste en facilidades en la visita. Al respecto, los expertos de ‘CampmanyAbogados’ señalan que «la evaluación de la discapacidad debe llevarse a cabo en condiciones de accesibilidad universal, y con los ajustes necesarios que permitan a los solicitantes interactuar con el equipo multidisciplinar que va a calificar su grado de discapacidad. Además, se puede acudir al examen médico acompañado de personas de confianza».
Incluso, en determinados casos, es posible que se realice una valoración de forma telemática por parte del equipo de profesionales de los servicios sociales. Eso sí, siempre que no sea posible una visita presencial.
En tercer lugar, encontramos la resolución y la notificación por parte de los servicios sociales. Si se concede la discapacidad, también se incluirá el porcentaje reconocido al ciudadano, en función de la puntuación obtenida en los baremos. Además, en la resolución también se recoge si existe movilidad reducida.
Desde la fecha de solicitud, la resolución debe llegar al ciudadano en un plazo máximo de seis meses. En algunos casos puntuales, el procedimiento puede catalogarse como tramitación urgente, acortando el plazo de resolución hasta tres meses como máximo.
Como cuarto paso, desde los servicios sociales de la Comunidad Autónoma correspondiente, comunicarán al ciudadano si la discapacidad reconocida tiene carácter provisional o definitivo.
Finalmente, la Administración pertinente emitirá una tarjeta en la que se certifica el grado de discapacidad reconocido al ciudadano. Esta tarjeta es imprescindible para que la persona con discapacidad pueda acceder a diferentes ayudas, beneficios o prestaciones.