Alquilar una vivienda en vacaciones tiene muchas ventajas con respecto a reservar una habitación de hotel, sobre todo si viajamos en familia. Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el alojamiento saldrá mucho más barato. Además, podremos invitar a otros amigos y familiares, recortar la cuenta de gastos y sentirnos como en casa. No obstante, puede surgir algunos problemas entre propietarios e inquilinos si la situación no es como estaba prevista.
Por ejemplo, algunas de las incidencias más comunes que denuncian las personas que alquilan viviendas en vacaciones, es que el inmueble no estaba en las condiciones que se prometían. Por otro lado, también se quejan de la falta de higiene o el mal estado del mobiliario y los electrodomésticos de la cocina.
En este sentido, para evitar este tipo de problemas la OCU tiene algunos consejos muy útiles, que te harán evitar sustos cuando decidas alquilar una vivienda este verano. Así, podrás saber en todo momento cuáles son los pasos que debes seguir antes de firmar el contrato, así como qué debes hacer si surgen problemas durante la estancia.
Consejos de la OCU para evitar estafas en el alquiler de viviendas
Una de las primeras cosas que debes hacer, es informarte muy bien acerca de las condiciones en las que está la vivienda. Así tendrás una idea bien hecha en tu cabeza de lo que es, y si realmente se ajusta a lo que estás buscando para este verano.
Lo ideal es visitarla, pero si esto no es posible siempre puedes pedirle al arrendador un dossier con las fotografías de todo lo que tiene el inmueble tanto en el interior como en sus exteriores. En cualquier caso, estos son los 5 consejos útiles que da la OCU a los consumidores para evitar estafas al alquilar una vivienda en vacaciones:
- Infórmate acerca de las condiciones en las que está la vivienda que vas a alquilar (estado del mobiliario, situación geográfica…).
- Negocia las condiciones: lo mejor es que arredador e inquilino lleguen a un acuerdo entre el precio y las condiciones antes de firma el contrato (la señal, la fianza, el inventario de enseres…).
- La señal que pagarás para reservar el inmueble debe ser descontada del total de la estancia. Pide que conste en el contrato el importe de la señal, y hazte con una copia y un justificante de pago.
- No firmes el contrato ni el inventario antes de comprobarlo: si no formulas ninguna objeción, con tu firma estarás dando tu conformidad a lo que consta en ese inventario.
- Pide un teléfono de contacto para eventuales incidencias.
Una vez de acuerdo entre ambas partes, el inquilino tendrá que pagar lo pactado por el alquiler descontando la señal entregada. Y el arrendador le entregará las llaves del apartamento, y le informará de todo lo que puede hacer si encuentra cualquier alteración durante la estancia.
¿Qué ocurre si tengo un problema con el inmueble?
En el caso de que hayas contratado un servicio con un propietario particular, la OCU aconseja resolver los problemas de forma que ambas partes lleguen a un acuerdo amistoso. Si esto no es posible, como lo que se ha firmado es un contrato entre particulares, el inquilino no tiene la consideración de consumidor. Y si tiene que hacer alguna reclamación, tendrá que ser mediante demanda ante el juzgado de primera instancia de la localidad en la que se encuentre la vivienda.
Si has contratado con una agencia inmobiliaria, deberás rellenar una hoja de reclamaciones e intentar solucionarlo a través de esta vía. Si tampoco se resuelve, no quedará más remedio que la demanda judicial.
Por esta razón, lo mejor es que guardes toda la documentación que has entregado durante el proceso de arrendamiento. Para que puedas tener pruebas suficientes en el juzgado, en caso de que tengas que resolver cualquier incidencia de forma judicial.