Uno de los objetivos cuando cumplimos cierta edad es encontrar el estado de bienestar, buscando un ambiente saludable que favorezca a nuestra salud mental. Para ello debemos de llevar a cabo una serie de pautas para tener una vida saludable y así evitar la aparición de cualquier enfermedad o tener que recurrir a la atención sanitaria, situando nuestra salud por encima de todo.
Los expertos siempre han marcado varios puntos claves a la hora de buscar este tipo de vida saludable, como puede ser el no fumar, realizar ejercicio físico, tener una alimentación correcta, comiendo más frutas y verduras y dejando las grasas saturadas, y mantener un peso equilibrado. Si llevamos a cabo todos estos consejos, mantendremos un estilo de vida saludable.
5 consejos para mantener una vida saludable con más de 50 años
A continuación vamos a ofrecer un listado con 5 consejos para mantener una vida saludable con más de 50 años.
Realizar ejercicio físico
Uno de los tips que siempre se introduce cuando se habla de vida saludable es dejar atrás la vida sedentaria. Y es que eso solo conlleva inconvenientes y malos hábitos para nuestro cuerpo. Lo ideal es intentar formar ejércitos o hacer deporte fuera de ellos para hacer algo de ejercicio y despejar un poco la cabeza al mismo tiempo. Si esto no es posible, se recomienda caminar al menos media hora al día para evitar problemas cardíacos prematuros y mantenerse en forma.
Además, otro tipo de ejercicio como el yoga o el pilates nos ayudan a mantenernos sanos y fuertes, a perder peso e incluso a reducir los niveles de estrés que tanto desencadenan en el día a día.
No fumar
El tabaco es una de las principales causas de muerte en todo el mundo. Fumar causa una amplia gama de problemas de salud, entre los que se incluye:
- Ataques cardíacos
- Accidentes cerebrovasculares
- Enfisema
- Bronquitis crónica
- Cáncer de pulmón, laringe, boca, esófago, vejiga y páncreas
Alimentación correcta
Si queremos tener un estilo de vida saludable, deberemos de tener en cuenta la nutrición. Y es que no es necesario obsesionarse con todo lo que comemos para estar saludables, pero sí debemos ser más conscientes a la hora de elegir los alimentos que consumimos.
Trate de llevar una dieta balanceada que no evite los alimentos que su cuerpo necesita y que no incluya alimentos sobrecargados con calorías vacías, como: son las patatas fritas o los refrescos. Otro ejemplo es la comida basura. Los expertos aconsejan sustituir estas comidas por verduras, frutas, carnes blancas, fibra, legumbres y abundante agua.
Estas grasas saturadas la puedes cambiar añadiendo a tu dieta más frutas y verduras, ya que son muchos los beneficios que tienen las frutas y vegetales. Estos alimentos proporcionan un gran número de vitaminas y minerales, además de fibra que favorece la digestión y nos permite disfrutar de otros beneficios.
Baja la ingesta de grasas saturadas
Como hemos señalado, no es necesario que nos prohibamos alimentos y no volvamos a comer, sino que lo ideal es una dieta regular donde podamos darnos un capricho de vez en cuando. Eso sí, en el día a día se recomienda eliminar todo tipo de grasas saturadas que no aportan nada a una vida sana.
Mantén un peso equilibrado
Por último, pero no menos importante, encontramos el peso. Ya hemos hablado de hacer ejercicio, controlar la dieta, eliminando las grasas saturadas, y no podía faltar el tener un equilibrio con el peso. Y es que tener sobrepeso o ser obeso puede aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades graves, como enfermedades cardíacas, derrames cerebrales, diabetes, cáncer y presión arterial alta.
De hecho, no solo la obesidad es un problema, sino que estar por debajo de nuestro peso recomendado está directamente relacionado con problemas cardíacos, baja resistencia a las infecciones, fatiga crónica, depresión, anemia y un sinfín de otras enfermedades.