Cada día se confeccionan y reparten miles de mascarillas para prevenir del contagio por coronavirus. Estas mascarillas se realizan por cientos de voluntarios en todo el país, pero nos olvidamos de un colectivo de personas que están teniendo un handicap por el hecho de tapar la boca, las personas sordas. por este motivo, desde «Costaleros por nuestros mayores» han confeccionado 50 mascarillas accesibles.
Y es que las personas sordas, refuerzan su comunicación con otras personas a través de la lectura labiofacial (LLF), además de apoyo a la lengua de signos. Por ello, desde “Costaleros por nuestros mayores”, un grupo de voluntarios que ayuda a cientos de familias vulnerables de Jerez de la Frontera con alimentos y elaboración de mascarillas a grupos de riesgo, han querido tener en cuenta a estas personas con la fabricación de mascarillas accesibles.
Francisco Zuasti, experto de accesibilidad, miembro de este grupo de voluntarios y fundador del medio Todo Disca, lo propuso al grupo de elaboración de mascarillas para que estas personas no quedaran excluidas. Algo que han agradecido desde asociaciones de personas sordas.
Lectura labiofacial (LLF)
La lectura labiofacial (LLF) es una técnica con la que una persona comprende lo que se le habla observando los movimientos de los labios de su interlocutor e interpretando los fonemas que éste produce.
Estas mascarillas accesibles tienen la peculiaridad de tener una ventana central transparente para que las personas sordas puedan comunicarse entre sí y además puedan leer los labios a las personas hablantes, por lo que le facilitaría su comunicación y entendimiento.
Para la elaboración de estas mascarillas han utilizado materiales plásticos resistentes y transparentes. Incluso protegen más de la propagación y contagio de cualquier bacteria que el resto de mascarillas que se confeccionan, ya que utilizan un material que no transpira.
Tomás Sampalo e Inma Vadillo, miembros de la dirección del grupo de voluntarios, afirman que esto es un motivo más para estar con todas las personas en estos difíciles momentos que tiene nuestra ciudad y país, sin olvidarnos por supuesto de las personas con discapacidad. Las primeras unidades serán donadas a la asociación de personas sordas de Jerez (Apesorje).