El calor vuelve a amenazar la temperatura glacial de nuestra cerveza. Siempre se ha dicho que hay tres cosas que nunca son para siempre, por más que diga la televisión: el amor, el dinero y una cerveza helada. Todo se acaba. De ahí que las mentes pensantes siempre funcionen en pos de conseguir mantener los mejores grados de una bebida indispensable en verano… y cuando no es verano. Con el calor, nada como conocer más remedios naturales para aguantar esos pocos grados un poco más.
Define la Real Academia Española (RAE) la cerveza como una bebida hecha con granos germinados de cebada u otros cereales fermentados en agua, y aromatizada con:
- Lúpulo
- Boj
- Casia
No siempre tenemos a nuestra disposición una buena nevera portátil que solemos llevar a la playa o la piscina, o un congelador dentro de casa que nos eche un cable.
Por eso tenemos que tirar de remedios naturales que nos permitan salir del paso para aguantar unos minutos más ese frío tan beneficioso para el consumo de la cerveza.
¿Funciona la sal para mantener fría la cerveza?
Si estamos en un campo, y por lo que sea, no tenemos congelador a mano, una buena idea para mantener fría la cerveza puede ser llenar un recipiente.
No importa si es un barreño o cualquier tipo de vasija, lo cierto es que con unos hielos que tengamos a mano o compremos en un momento podemos hacer maravillas a la hora de enfriar la cerveza.
¿Y la sal? ¿Permite que el proceso de enfriamiento se acelere? Lo cierto es que sí, que irá helándose más y más y la cerveza irá adquiriendo el punto glacial.
Como mucho, debemos poner una cucharada grande de sal por cada cuenco de agua que haya en el barreño o en la superficie donde vertimos las cervezas.
Otros remedios caseros para enfriar la cerveza
Si no tenemos a mano un congelador, podemos tirar de otras alternativas básicas para poder mantener la cerveza en las temperaturas más bajas posibles.
Sirven, por ejemplo, las bolsas isotérmicas, que mantienen la cadena de frío de nuestros alimentos y bien pueden servir, en un momento dado, para hacer que nuestras cervezas aguanten un poco más.
Normalmente, las bolsas isotérmicas ayudan a mantener la bebida entre los dos y ocho grados, congelando latas y lo que haga falta.
Otro remedio casero que nos puede servir son sprays de aire comprimido, de forma que si los colocamos bocabajo, nos permitirá enfriar en condiciones las botellas y latas.
Papel de periódico o una toalla, a la hora de envolver latas y botellines, también sirven siempre y cuando los humedezcamos antes. El agua se evaporará y la bebida se enfriará.