El Ayuntamiento de Madrid cuenta con el Plan Adapta 2024, que tiene el objetivo de ofrecer viviendas y locales más seguros y accesibles para las personas con discapacidad. Es decir, la finalidad de este Plan Adapta pasa por mejorar las condiciones de accesibilidad de las personas con discapacidad o enfermedades raras.
En este sentido, el gobierno municipal ha informado de que el Plan Adapta 2024 cuenta con un presupuesto de 4 millones de euros y las personas beneficiarias podrán recibir ayudas de hasta 30.000 euros. En las bases se recoge que se pueden solicitar ayudas para actuaciones en las viviendas de personas con discapacidad o enfermedades raras. También para adoptar medidas de accesibilidad en edificios residenciales y, por primera vez, se contemplan ayudas para locales situados en la planta baja de edificios de uso residencial.
¿Qué es el Plan Adapta del Ayuntamiento de Madrid?
El Plan Adapta consiste en subvenciones para fomentar la adaptación de las viviendas en donde residan personas con discapacidad y enfermedades raras, para la mejora de su calidad de vida mediante la eliminación de barreras arquitectónicas y la mejora de su autonomía facilitando la movilidad interior o aumentando la seguridad en el entorno doméstico, así como en fomentar la accesibilidad en los edificios residenciales y locales situados en la planta baja de edificios de uso residencial con el objetivo de eliminar barreras arquitectónicas y sensoriales.
El ámbito al que se dirigen estas ayudas son las viviendas, inmuebles y locales objeto de las actuaciones subvencionables. Como es obvio, deberán de estar ubicados exclusivamente en el término municipal de Madrid.
¿Qué tipo de reformas puedo hacer?
El Plan Adapta, que es compatible con las ayudas del Plan Rehabilita, tiene tres líneas de actuación. La primera contempla actuaciones en la vivienda siempre que la discapacidad reconocida esté relacionada con la ayuda solicitada. Por ejemplo, se pueden modificar las paredes divisorias para ampliar espacios y mejorar la accesibilidad, instalar sistemas de estimulación o de atención temprana o poner paredes acolchadas para evitar autolesiones. También incluye la colocación de barras, pasamanos, rampas y otros elementos de ayuda para la movilidad, o la instalación de domótica que contribuya a favorecer la autonomía en el hogar, así como la instalación de sistemas de aviso y señalización en la vivienda, visuales, sonoros, táctiles o por vibración, según corresponda con la capacidad funcional de la persona. Y si todas estas reformas causan otros pequeños desperfectos en las viviendas, no será un problema porque las ayudas también cubren las obras auxiliares que sean precisas tales como pintura, carpintería, o albañilería entre otras.
Una segunda línea de actuación está destinada a locales situados en la planta baja de edificios de uso residencial, donde se podrán eliminar barreras arquitectónicas, colocar salvaescaleras o automatismos para la apertura de puertas, entre otros, todo con el objetivo de mejorar la accesibilidad. También se podrán adaptar los cuartos de baño o construir uno nuevo, y los mostradores.
Además, el documento incorpora como novedad una línea específica para las obras de accesibilidad en portales de edificios residenciales como puede ser la instalación de rampas, plataformas elevadoras, salvaescaleras, la señalización de itinerarios peatonales accesibles desde la entrada al edificio desde la vía pública hasta las zonas comunes estanciales (juegos infantiles, instalaciones deportivas, piscina, garajes y estacionamientos) o la instalación de videoporteros accesibles.