Desde la aparición de Greta Thunberg, el síndrome de Asperger tiene mayor reconocimiento. Ya se sabe que es un trastorno del espectro autista al que dio nombre el psiquiatra austriaco Hans Asperger. Además, ahora también se sabe que el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, tiene este síndrome.
Assange ha sido acusado de 17 cargos bajo la Ley de Espionaje de los Estados Unidos y un cargo bajo la Ley de Abuso, además de otros cargos por lo que está en prisión y de ahí, que su caso haya sido noticia por el hecho de su posible extradición a otra cárcel e intentar paralizarlo con la excusa del riesgo de suicidio y el síndrome de Asperger.
A diferencia del autismo, el síntoma más distintivo de Asperger es el interés obsesivo en un objeto o tema único hasta el punto de llegar a excluir cualquier otro. Es por ello que quieren saberlo todo sobre ese tema en concreto.
Este trastorno afecta a la interacción social recíproca, la comunicación verbal y no verbal. Además, el síndrome de Asperger incluye una resistencia para aceptar el cambio, inflexibilidad del pensamiento así como poseer campos de interés estrechos y absorbentes; según recoge la Confederación Asperger España.
A este trastorno se le conoce como el ‘síndrome invisible’, puesto que no representa ningún rasgo físico ni tampoco intelectual. Sin embargo, las personas con síndrome de Asperger tienen más problemas con las habilidades sociales.
Estas personas tienden a tener un enfoque obsesivo en un tema o a realizar los mismos comportamientos una y otra vez. Los médicos entienden el síndrome de Asperger como un tipo de TEA de «alto funcionamiento». Esto significa que los síntomas son menos graves que otros tipos de trastornos del espectro autista.
Los médicos solían pensar que el Asperger era una condición aparte. Sin embargo, desde 2013, la última edición del libro estándar que usan los expertos en salud mental; llamado The Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (DSM-5), cambió su clasificación.
El DSM-5 también incluye un nuevo diagnóstico, llamado trastorno de comunicación social pragmática, que tiene algunos síntomas que se superponen a los del Asperger. Los médicos lo usan para describir a las personas que tienen problemas para hablar y escribir, pero que tienen una inteligencia normal.
Sobre Hans Asperger
Hans Asperger fue un pediatra, investigador, psiquiatra y profesor de medicina austríaco. Entre todos sus estudios, tenemos que destacar las nuevas investigaciones y descripciones de los denominados trastornos del espectro autista.
Una de las manifestaciones de dicho espectro es el síndrome de Asperger, que se denomina así en su honor. Además, Hans Asperger siempre fue muy conocido por sus tempranos estudios sobre desórdenes mentales, especialmente en niños.
Sobre el síndrome de Asperger
Como hemos indicado anteriormente, el síndrome de Asperger es un trastorno del desarrollo que se incluye dentro del espectro autista (TEA).
Síntomas
Los síntomas del síndrome de Asperger suelen aparecer muy temprano. Por ejemplo, un niño que tiene este trastorno no puede hacer contacto visual. También se puede ver como el pequeño parece incómodo en situaciones sociales y no sabe qué decir o cómo responder cuando alguien le habla.
No entiende el significado del lenguaje corporal o las expresiones en los rostros de las personas. A su vez, puede mostrar pocas emociones. Es decir, que no sonría cuando es feliz o que no se ría de un chiste.
También hay casos en que la persona con síndrome de aspeger no le gusta los cambios.
Las diferencias entre el autismo y el Asperger
En base a la descripción de ambos trastornos se llega a la conclusión de que son muy parecidos. Sin embargo, se pueden destacar algunas diferencias que son las siguientes:
- El autismo se manifiesta de forma evidente durante los 3 primeros años de vida del niño, sin embargo el Síndrome de Asperger no es tan evidente puesto que la capacidad intelectual de un niño con Asperger puede ser superior a la media.
- Los niños con autismo tienen dificultad con el lenguaje, sin embargo, los que tienen Asperger tienen un gran vocabulario y hablan perfectamente.
- En cuanto al movimiento los niños con autismo suelen mover las manos como en un aleteo o balancearse, mientras que los niños con Asperger pueden tener falta de coordinación.
Tratamiento
Cada persona es diferente, por lo que no hay un enfoque único para todos. Es por ello que dependiente del paciente y del médico será un tratamiento diferente.
- Entrenamiento en habilidades sociales.
- Terapia del habla y el lenguaje.
- Terapia cognitiva conductual (TCC).
- Educación y formación de los padres.
- Análisis de comportamiento aplicado.
- Medicina.
- Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (SSRI).
- Medicamentos antipsicóticos.
- Medicamentos estimulantes.
